Entre las comunidades autónomas gobernadas por el PP, destaca, para mal, Madrid, cuya sanidad pública está sufriendo un deterioro progresivo. En aquellas con administraciones presididas por el PSOE, son Baleares y Canarias las que más se alejan de lo que debería ser un sistema público sanitario ideal.
¿Y qué pasa en aquellos territorios que no están gobernados ni por populares ni por socialistas? Son tres: Cantabria, Euskadi y Catalunya. Al igual que ya hizo lamarea.com con el resto, se analiza, con base en 11 variables, cuál es el estado de la sanidad pública en estas comunidades.
Un adelanto: Catalunya es, de las tres, la que presenta peores datos. De hecho, solo Madrid tiene un mayor grado de privatización de la sanidad. En el extremo contrario está Cantabria, la comunidad con un nivel más bajo de privatización.
Cantabria, la comunidad con mayor ratio de profesionales y menor grado de privatización de la sanidad
El presidente de Cantabria, desde julio de 2015, es Miguel Ángel Revilla, del Partido Regionalista de Cantabria (PRC), que gobierna en coalición con el PSOE. Es la misma fórmula por la que Revilla ya estuvo al mando del Ejecutivo autonómico entre 2003 y 2011. En el periodo entre entonces y 2015, el máximo mandatario cántabro fue Ignacio Diego (PP).
El gasto sanitario público en Cantabria, con datos extraídos de la web Indicadores Clave del Sistema Nacional de Salud (INCLASNS), es de 1.855,99 euros al año por habitante protegido, lo que la sitúa como la sexta comunidad con mayor inversión. Ha subido considerablemente en los últimos años, puesto que en 2014 era de 1.324,38 euros.
De ese total, el porcentaje destinado a atención primaria es el 14,53%, lo que coloca a la región como séptima en la clasificación.
Su ratio de profesionales de la medicina es de 4,2 por cada 1.000 habitantes, la más alta junto con Aragón. En cuanto a la ratio de profesionales de la atención primaria (medicina de familia y pediatría), es de 0,78, por lo que está en mitad del ranking (eran 434 en 2009 y 455 en 2021).
Asimismo, es la tercera comunidad con la ratio más alta en personal de atención especializada: 2,35, solo superada por Navarra (2,5) y Asturias (2,55). Peor está en cuanto a enfermería, puesto que tiene la sexta ratio más baja (0,64), únicamente superior a la de Andalucía, Baleares, Comunidad Valenciana, Madrid, Región de Murcia y empatada con Canarias.
En el podio, pero por debajo, está respecto al tiempo de espera para una intervención quirúrgica no urgente: 146 días. Tan solo se espera más en Catalunya (156 días) y Aragón (183). Para conseguir una primera cita en atención especializada, la demora es de 70 días, en el medio de la clasificación.
Según el informe La Privatización de las CCAA 2022, elaborado por la Federación de Asociaciones para la Defensa de la Sanidad Pública (FADSP), a partir de nueve variables, Cantabria es la comunidad de España con menor grado de privatización en la sanidad.
Algunos de los parámetros que se tienen en cuenta son el porcentaje del gasto sanitario que se dedica a conciertos con la privada: un 3,11%, el segundo más bajo de todos los territorios; el gasto per cápita en seguros privados, 94 euros, el segundo menor por detrás de Navarra (89), y el porcentaje de camas privadas sobre el total: 0,6%, solo superior al de La Rioja.
Euskadi es la segunda que más invierte en sanidad pública y la que tiene menor tiempo de espera para una operación
Íñigo Urkullu, del Partido Nacionalista Vasco (PNV), es el lehendakari de Euskadi. Accedió al sillón de mando en 2012 y desde entonces no lo ha perdido, aunque desde 2016 gobierna en coalición con el PSOE.
La inversión en la sanidad pública es de 1.920,11 euros, únicamente por detrás de Castilla y León (1.936,35). Y el porcentaje que va para atención primaria es del 13,98% (en la mitad de la lista).
Su ratio total de profesionales de la medicina es de 3,8, la séptima más alta, mientras que la de atención primaria está en 0,8, en el centro de la clasificación (ha pasado de 1.685 en 2009 a 1.736 en 2021). Respecto al personal de atención especializada, la ratio es de 2,31, únicamente más baja que la de Aragón, Cantabria, Navarra y Asturias. En enfermería para primaria, su ratio es de 0,69, la sexta menor, igualada con Aragón.
Asimismo, es la comunidad con menos tiempo de espera para una operación (71 días) y para una primera consulta especializada (34).
En el ranking de FADSP, tiene un grado de privatización medio de la sanidad (era alto en 2019), según datos como el del gasto per cápita en seguros privados, 187 euros (el cuarto mayor); las camas privadas sobre el total (4,2%), en la mitad, y el porcentaje del gasto total dedicado a conciertos, el 6,15%, el séptimo más alto.
Catalunya es, junto con Madrid, la comunidad con mayor grado de privatización de la sanidad
El 55% de los militantes de Junts per Catalunya votó, el pasado 7 de octubre, a favor de salir del Gobierno de la Generalitat. Desde entonces, Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) gobierna en solitario, con Pere Aragonès al frente, lugar que ocupa desde mayo de 2021.
El gasto catalán en la sanidad pública es de 1.861,06 euros por año y habitante, el sexto mayor. Ha tenido un gran incremento, puesto que en 2019 era de 1.599,39 euros. Y el porcentaje destinado a atención primaria es del 13,03%, el sexto menor.
Sobre la variable de los profesionales totales de la medicina, Catalunya tiene una ratio de 3,4, la quinta más baja de España, ya que solo supera a la de Andalucía, Baleares, Canarias y la Comunidad Valenciana. En cantidad de trabajadores ha aumentado considerablemente desde 2009: de 5.481 a 5.727.
La ratio de médicos/as de familia y pediatras de atención primaria es de 0,74, solo superior a la de Andalucía, Baleares, Canarias y Madrid. En atención especializada tiene una ratio de 2,09 (en el centro) y en enfermería de 0,75 (la séptima mayor).
La demora para operarse en Catalunya es la segunda más alta (156 días), solo superada por Aragón (183) y el tiempo de espera para una cita especializada es de 93 días (el sexto más alto).
Catalunya, según la FADSP, es la segunda comunidad con mayor grado de privatización de la sanidad, después de Madrid. Lleva en ese puesto (al igual que Madrid en el primero) desde 2014.
El porcentaje destinado a conciertos con la privada es del 23,61%: el mayor de España con muchísima diferencia (la siguiente es Baleares, con un 9,2%). Respecto al gasto per cápita en seguros privados, asciende a 260 euros (es superior en Baleares y Madrid). Y de nuevo lidera con holgura la clasificación en cuanto al porcentaje de camas privadas sobre el total (39,2%). La siguiente es Madrid, con un 13,6%.