Economía

“La invasión zombi lleva en nuestras vidas desde la revolución neoliberal de finales de los 70”

El secretario general de CCOO, Unai Sordo, reflexiona en esta entrevista sobre los monstruos que nos rodean a diario, más allá de las películas.

Comentarios
  1. SINDICALISMO DE LUCHA CONTRA EL SINDICALISMO DE LA CONCERTACIÓN
    «Se presenta al sindicalismo claudicante como a adalides de la “responsabilidad”.
    «las movilizaciones de la clase trabajadora finalizan casi siempre con pactos vergonzantes entre la patronal y los sindicatos mayoritarios, por lo que la sensación de frustración por parte de las personas que han participado en las acciones y huelgas, al verse traicionadas, les desanima para abordar nuevos procesos de lucha. Esa desmovilización, producto de una práctica sindical entreguista, sirve como coartada a las propias centrales sindicales pactistas para justificar su propia práctica, arguyendo que “no hay condiciones para hacer otra cosa”. Es como el olivo que se nutre de sus propias aceitunas caídas».
    Lo dijo en su día Felipe González: En el control obrero juegan un papel esencial los sindicatos.
    https://canarias-semanal.org/art/33473/sindicalismo-de-lucha-contra-el-sindicalismo-de-la-concertacion

  2. Más importante que la realidad práctica que se nos presentó desde 2008 en forma de fracaso evidente de una hegemónica neoliberal que nos puso al borde de colapso económico, después de imponer sus métodos desde la mencionada revolución conservadora hasta explotar en la Gran Recesión repitiendo la historia de 1929, es convencer y alienar a la gente en la creencia de que sus verdugos sus salvadores. Que ellos son los que crean el trabajo y generan la riqueza para el bien de todos. Ciegos, aun no se enteran de que el enorme desarrollo tecnológico que ha elevado la productividad a niveles insospechados, no solo no se ha traslado a los salarios, que apenas se han actualizado en la inflación, sino que ha sido adsorbida por los beneficios que, a falta de ventajas, observamos pueden adsorber, mediante el oportunismo del mercado –elevar los precios ante la escasez de una guerra imprevista en un mercado incompetente para reajustarse en tales condiciones-, le elevación de los precisos disipando en la inflación la cosecha de millones expropiados.

  3. Si han decidido entrar en esta noticia, no les vamos a “robar” mucho tiempo con ella. Tan sólo les vamos a dejar un breve vídeo de una marcha, de las muchas que se han llevado a cabo estos días en el estado francés contras las políticas que inciden muy negativamente en la vida de los y las trabajadoras. Los y las manifestantes cantan la Internacional, en medio de sus justas reivindicaciones.
    Mientras eso sucede en el país vecino del norte, en el estado español, eso que llaman izquierda, o está coaligada con el gobierno de derechas malamente disfrazado progre o, simplemente, desaparecida. Y el grueso de la población obrera, lejos de plantar cara a sus verdugos, se dedica a ver partidos de fútbol. Ahí sí que se congrega mucha gente.
    «El opio del pueblo» se decía en tiempos del franquismo ya que sólo se escuchaba futbol; pero por lo visto esta artimaña es propia de todas las dictaduras: franquista y capitalista.
    https://insurgente.org/en-francia-se-manifiestan-cantando-la-internacional-en-espana-si-se-concentran-es-para-ver-los-partidos-de-futbol/

  4. Economista S. Niño Becerra:
    ESPAÑA IMPORTARÁ A MILES DE ELECTRICISTAS, CARPINTEROS Y ALBAÑILES DEL EXTRANJERO… UNA CATÁSTROFE EN EL MERCADO LABORAL
    España, más próxima de la «jungla» que de los inexistentes e idílicos «jardines » que describe Josep Borrell.
    El Gobierno de la Coalición que encabeza Pedro Sánchez prevé la promoción de miles de contratos de electricistas carpinteros y albañiles en el extranjero, para supuestamente suplir falta de mano de obra de esas especialidades en España. La patronal lo tendrá más fácil que nunca para «incentivar» la precariedad laboral.
    «Así va mal; ese no es el camino», expresó el economista en relación con ese proyecto, advirtiendo que ello podría tener consecuencias muy graves para el mercado laboral español.
    Sobre este tipo de contratos, el economista formuló algunas interrogantes:
    – «¿La oferta de trabajo para estos empleos es insuficiente o la demanda de trabajo está ofreciendo unas condiciones laborales por debajo de otros?
    – En consecuencia: ¿al aumentar la oferta de trabajo, todavía empeorarán más estas condiciones laborales?
    – ¿Caerá todavía más la productividad?
    Según Niño Becerra, los efectos de ese tipo de medidas ya se pueden visualizar premonitoriamente si se contempla el panorama que ya se ha producido en el sector turístico: en algunos lugares de España no hay profesionales de hostelería. Y es muy lógico que así sea, pues con los salarios que se ofrecen, a nadie le es posible lograr subsistir en estas zonas.
    ¿Esta nueva oferta de trabajo -se pregunta el economista- aceptará la precarización, como ya ha pasado en la historia reciente de España?. «Si es así, mal: no es el camino», dice previniendo de un auténtico desastre social.
    Según el proyecto gubernamental, a partir de ahora las empresas tendrán más fácil que nunca la ejecución de contratos para traer trabajadores de la construcción procedentes del extranjero, porque pasarán a ser considerados como ocupaciones de cobertura difícil.
    De acuerdo con un estudio realizado al respecto en el año 2021, el 48% de los trabajadores españoles tienen un contrato precario. este informe, que está basado en datos de 2019, fue dirigido por Hipólito Simón, catedrático de Economía en la Universitat d’Alacant, y en el se concluye que el fenómeno de la precariedad en España es estructural al rozar al 50% de los trabajadores los que están sujetos a este tipo de condiciones.
    Entre los empleados sometidos a la precarización, un 24% ellos sufren carencias consideradas secundarias (exceso de horas, trabajo en fin de semana, o sobrecualificación). Dicho de otra forma, el 72% del total sufren algún tipo de precariedad, frente a otro 28% de asalariados que disponen de un empleo de calidad. Y ello sin agregar que el 24% de la población asalariada sólo llega a percibir un sueldo inferior a 1.200 euros brutos mensuales, un salario que los convierte igualmente en precarios.
    https://canarias-semanal.org/art/33441/nino-becerra-espana-importara-a-miles-de-electricistas-carpinteros-y-albaniles-del-extranjero-una-catastrofe-en-el-mercado-laboral

  5. Iglesia S.A. Dinero y poder de la multinacional vaticana en España, Angel Munárriz.

    «Presupuestos Generales del Estado y asignación tributaria anual a la Iglesia católica», por Francisco Delgado.
    En la casilla que se destina a la Iglesia católica, año tras año, no más de un tercio de los contribuyentes la señala, es decir que son muchos más las personas que no la marcan.
    Una de las propuestas de Europa Laica es que, como en Alemania, quien señale la casilla de la Iglesia católica y/o fines sociales, lo paguen de su bolsillo.
    Es ahora, en la discusión de los Presupuestos Generales del Estado, cuando se podría revertir y que desaparezca esta forma ilegítima de financiación de la Iglesia católica.
    Desde hace años (por parte de algunas entidades, como Europa Laica) hay dos propuestas encima de la mesa tanto para el Gobierno, como destinadas al Congreso y Senado y a los diferentes grupos parlamentarios. La más lógica, que el Estado de esa recaudación no entregue ni un solo euro a una entidad privada e ideológica, como es la Iglesia católica, en suma, que desaparezca la casilla “Ic”. La otra propuesta, que está estipulada en algunos países de nuestro entorno, como Alemania, que quien señale la casilla (Ic) y/o (fines sociales) paguen (de su bolsillo ese 0,7%) y en el caso de las entidades sociales, la (o) el contribuyente decida a qué entidad se lo quiere entregar. Así sólo la Agencia Tributaria actuaría de intermediaria recaudadora, que no sería poco.
    Parece una propuesta lógica, muy lógica y, sobre todo, justa y justificable desde un punto de vista tributario (incluso en el marco de la UE), porque, así, el Estado no dejaría de ingresar unos 300, más unos 325 millones de euros al año, por término medio (en total unos 625 millones de euros/año).
    En el caso de las entidades sociales, podrían aplicarse esas subvenciones, como ya ocurre, directamente de los PGE y del de las CCAA. Porque -en realidad- la casilla de “fines sociales” se introdujo, en su momento, para (maléficamente) tratar de “justificar” la de los obispos.
    Un año más, me consta que ni el Gobierno, ni ningún otro grupo parlamentario, al igual que ha ocurrido en años anteriores, va a tomar esa decisión y, por lo tanto enmendar los PGE de 2023, en este sentido, cuya aplicación sería para la declaración de 2023, cuyo IRPF se liquidaría en 2024
    Por ello yo les acuso a todos ellos, desde el ala izquierda hasta la derecha de ser cómplices de un hecho vergonzante. Son colaboradores activos un año más de una tremenda injustica fiscal y social, que roza el delito político… Y lo son aun más los que en sus declaraciones (con la voz más o menos pequeña) hablan de justicia social, laicidad, redistribución tributaria, etc.
    https://laicismo.org/presupuestos-generales-del-estado-y-asignacion-tributaria-anual-a-la-iglesia-catolica-%c2%b7-por-francisco-delgado/271439

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.