El Gobierno se pronuncia en el ‘caso Vinicius’: la ley actual es suficiente

Las imágenes de los insultos racistas al futbolista Vinicius Júnior en el estadio de Mestalla han dado la vuelta al mundo. En las últimas horas, desde diferentes ámbitos internacionales (y singularmente desde Brasil, por parte de su presidente, Lula da Silva), se ha indicado que España tiene un problema grave con el racismo. La imagen del país, por tanto, se ha visto seriamente afectada. Desde el Gobierno, sin embargo, no han dado muestras de excesiva preocupación.

El ‘caso Vinicius’ se coló hoy en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. Los temas centrales de la exposición, los que estaban en la agenda oficial, fueron la nueva Ley de Paridad, la estrategia nacional de Inteligencia Artificial y el refuerzo en las partidas destinadas a mejorar la atención primaria y la salud mental. Las preguntas de la prensa, en cambio, se centraron en el acoso sufrido por el jugador afrobrasileño del Real Madrid. La ministra portavoz, Isabel Rodríguez, improvisó algunas respuestas que podrían entenderse, de alguna forma, como ajenas a la realidad social.

«Hay que dejar claro que estos comportamientos, en España, se persiguen y se castigan», afirmó en todas y cada una de las preguntas que le hicieron al respecto. «Podemos sentirnos orgullosos de ser un país en el que las leyes persiguen este tipo de hechos. Un país en el que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (FCSE) y las instituciones judiciales actúan en consecuencia. Y, además, donde mayoritariamente condenamos los comportamientos [racistas] y a aquellos que los justifican».

«Es un asunto sobre el que no cabe ser neutral», añadió Rodríguez. «Hay que ser tajante. Hay que decir claramente que somos antirracistas. Porque en España estamos combatiendo este tipo de comportamiento. Lo condenamos y trabajamos para erradicarlo».

¿Tradición antirracista?

La ministra de Política Territorial destacó el tiempo que nuestras instituciones llevan luchando contra la lacra del racismo. En el ámbito deportivo se refirió concretamente a la ley contra la violencia, el racismo, la xenofobia y la intolerancia en el deporte, «que data del año 2007», subrayó. Y fue más allá en su defensa de España como país que reprime cualquier manifestación racista: «Creo que hay que distinguir las acciones que se enmarcan dentro del régimen interno del deporte e incluso dentro de la propia Liga, de aquellas que tienen que ver con la legislación común y que se aplican independientemente de que estos hechos ocurran en un campo de fútbol, en un supermercado o en una fábrica. Estos hechos, en España, se persiguen y se castigan».

La reacción tras el ataque sufrido por Vinicius es, de hecho, una demostración de que esta lucha, a juicio de la ministra, funciona: «Aquí están trabajando los órganos internos en el ámbito deportivo. Se han emitido distintos comunicados por parte de las instituciones. Se ha reunido con carácter de urgencia la Comisión Antiviolencia, se han abierto expedientes, y las FCSE, como ustedes están viendo, están identificando y deteniendo a las personas implicadas. Así protegen nuestras normas a las personas que puedan verse afectadas».