lamarea.com
  • La Marea
  • Kiosco
  • Climática
DONA SUSCRÍBETE
SUSCRÍBETE
Iniciar sesión
  • Internacional
  • Cultura
  • Política
  • Sociedad
  • Opinión
  • Medio ambiente
  • Economía
  • Revista
  • Internacional
  • Cultura
  • Política
  • Sociedad
  • Opinión
  • Medio ambiente
  • Economía
  • Revista
ANTERIOR

Fran Molero, el último condenado a prisión que rodeó el Congreso

SIGUIENTE
Este verano refúgiate en La Marea. Suscríbete desde 17€

OTRAS NOTICIAS | Sociedad

Fran Molero, el último condenado a prisión que rodeó el Congreso

“He sido víctima de un juicio falso, me han condenado sin prueba ninguna más allá de los testimonios policiales, totalmente contradictorios”, asegura el sindicalista andaluz, que ha pedido un indulto

Eduardo Muriel
27 enero 2016 Una lectura de 3 minutos
Telegram Linkedin

Las cargas se iniciaron justo a tiempo para salir en directo en el telediario de la tarde. A las 20:30 horas, en abril de 2013, en el marco de una protesta alrededor del Congreso que pedía “un cambio de régimen”, un grupo de encapuchados comenzó a lanzar objetos a la policía y a zarandear las vallas del perímetro de seguridad. Entonces comenzaron los enfrentamientos y las cargas de los antidisturbios se extendieron por los alrededores, desde Cibeles hasta Atocha.

En medio del desorden y las carreras, la policía detuvo a Francisco Molero, un militante malagueño del Sindicato Andaluz de Trabajadores, quien fue llevado a los calabozos de Moratalaz. “Sufrí un trato brutal, lleno de violencia, con insultos de todo tipo. Fue horrible”, narra. En dependencias policiales, Molero asegura que vio a agentes vestidos con símbolos de izquierda y pañuelos palestinos. “Eran la gente que habíamos visto meter baza ante el Congreso”, asegura.

En cualquier caso, llegó el juicio y Molero ha sido condenado a cinco años de prisión y una multa de 16.000 euros por atentado a la autoridad y lesiones. “He sido víctima de un juicio falso, me han condenado sin prueba ninguna más allá de los testimonios policiales, totalmente contradictorios”, asegura. Fue identificado, añade, por llevar “ropa oscura y pañuelo palestino”, una descripción que acota muy poco en una manifestación de este tipo. “Me confundirían con otra persona. Lo siento mucho por los agentes lesionados pero yo no fui”, sostiene.

Ahora, a Molero le toca esperar. Sus padres, que tienen un estado de salud cada día más precario y se quedarían, si se ejecuta la sentencia, sin la persona que les ofrece los cuidados, han pedido un indulto. El SAT y otros colectivos se están movilizando, además, para brindarle apoyo y dar visibilidad a su caso. El pasado fin de semana cerca de un millar de personas salieron a la calle en Málaga para pedir su libertad. Pero no sólo la suya: “Se dijo bien claro que no estamos de acuerdo con ninguna sentencia contra personas que no han hecho ningún daño”, enfatiza Molero.

“Represión preventiva”

Ramón Walsh, portavoz de la Coordinadora 25-S, una de las organizaciones que convocaron aquel Escrache al Congreso, describe la condena al militante del SAT como un “caso claro de represión política”. “En aquella acción tuvimos a compañeros a los que detuvieron el día anterior. A mí y a otra persona nos siguieron, nos pararon, registraron nuestro coche y nos pusieron contra una valla”, asegura el activista, quien denuncia esta “represión preventiva”.

La detención de Molero se produjo, según Walsh, al estilo de otras muchas. “La policía carga, te pasa por encima y pillan al que pueden, y entonces a éste le meten el paquete básico, es decir, el de atentado a la autoridad y otros cargos”, sostiene. El activista destaca la necesidad de luchar por una “amnistía social” que exculpe a todos los condenados en protestas durante los últimos años.

El Escrache al Congreso de abril de 2013 supuso una ruptura con respecto al discurso sobre la violencia que defendía el 15-M, movimiento que se desmarcó de la cita. La plataforma ¡En Pie!, otra de las convocantes, que al final de aquella jornada reconocería el fracaso de la movilización y la falta de apoyo social, defendió en un comunicado previo: “Advertimos que no estamos dispuestos a tolerar agresiones en el legítimo ejercicio de la defensa de nuestros derechos fundamentales, por lo que en ella se anima a ejercer la legítima defensa cuando sea necesario”.

No es un caso aislado

Fran Molero no ha sido el único condenado a prisión por participar en una protesta junto a una cámara legislativa. Lo mismo les ocurrió a ocho activistas que participaron, en junio de 2011, en una acción en el Parlament de Catalunya, quienes fueron absueltos por la Audiencia Nacional y posteriormente condenados por el Tribunal Supremo, que contravino así su propia doctrina. Tienen penas de tres años de cárcel y se encuentran en estos momentos a la espera de que se resuelva la petición de indulto.

“El Tribunal Supremo parte de que la manifestación era ilegal, cuando en realidad ninguna autoridad administrativa la impidió”, explica la abogada, Isabel Elbal. “Uno de ellos fue condenado por ser identificado en unas imágenes en las que estaba detrás de [Pascual] Maragall, por lo que se supone que contribuía a actos ilícitos como son las coacciones y la obstaculización”, añade. El caso está ahora en Estrasburgo por vulneración de derechos humanos.

Telegram Linkedin

Si te gusta este artículo, apóyanos con una donación.

€
  • #indulto
  • #protesta
  • #Rodea el Congreso
  • #SAT

¿Sabes lo que cuesta este artículo?

Publicar esta pieza ha requerido la participación de varias personas. Un artículo es siempre un trabajo de equipo en el que participan periodistas, responsables de edición de texto e imágenes, programación, redes sociales… Según la complejidad del tema, sobre todo si es un reportaje de investigación, el coste será más o menos elevado. La principal fuente de financiación de lamarea.com son las suscripciones. Si crees en el periodismo independiente, colabora.

Suscríbete dona
Comentarios

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.

Lo más leído

  • "No puede ser que a un 'rider' que asume todos los riesgos le paguen tres euros por un pedido de noche"
  • Las familias de la Flotilla de la Libertad piden la liberación del nuevo barco interceptado por Israel
  • Del gueto de Varsovia al de Gaza: el uso del hambre como arma de guerra
  • Gemma Ruiz Palà: “Hoy parece que el franquismo fue Disney”
  • Personalidades israelíes piden sanciones drásticas contra su gobierno: "Nuestro país está matando de hambre a Gaza"

Actualidad

  • Internacional
  • Cultura
  • Política
  • Clima
  • Sociedad

Conócenos

  • La Marea
  • Cooperativistas
  • Transparencia
  • Política de cookies
  • Política de privacidad

Kiosco

  • Suscripciones
  • Revistas
  • Libros
  • Cursos
  • Descuentos
  • Contacto

Síguenos

Apúntate a nuestra newsletter

Apúntate
La Marea Ayúdanos a hacer La Marea posible. Haz una donación o suscríbete desde 50€ al año

MásPúblico sociedad cooperativa. Licencia CC BY-SA 3.0.

Compartir a través de

Este portal web únicamente utiliza cookies propias con finalidad técnica y necesarias para el funcionamiento de la web, no recaba ni cede datos de carácter personal de los usuarios sin su conocimiento. Sin embargo, contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas a la de LaMarea que usted podrá decidir si acepta o no cuando acceda a ellos. Leer más

AceptarResumen de privacidad
Política de Cookies

Resumen de privacidad

Este portal web únicamente utiliza cookies propias con finalidad técnica y necesarias para el funcionamiento de la web, no recaba ni cede datos de carácter personal de los usuarios sin su conocimiento. Sin embargo, contiene enlaces a sitios web de terceros con políticas de privacidad ajenas a la de LaMarea que usted podrá decidir si acepta o no cuando acceda a ellos.
Funcionales
Siempre habilitado

Las cookies funcionales son esenciales para garantizar el correcto funcionamiento de nuestro sitio web, ya que proporcionan funcionalidades necesarias. Desactivarlas podría afectar negativamente a la experiencia de navegación y a la operatividad del sitio.

Guardar y aceptar