Sociedad

Francisco Polo: “Change.org, empresa social y orgullosa de serlo”

El director de Change.org para España, Francisco Polo, opina sobre el artículo publicado en La Marea '¿Change.org o en la boca del lobo?'.

¿Sabes lo que cuesta este artículo?

Publicar esta pieza ha requerido la participación de varias personas. Un artículo es siempre un trabajo de equipo en el que participan periodistas, responsables de edición de texto e imágenes, programación, redes sociales… Según la complejidad del tema, sobre todo si es un reportaje de investigación, el coste será más o menos elevado. La principal fuente de financiación de lamarea.com son las suscripciones. Si crees en el periodismo independiente, colabora.

Comentarios
  1. Yo lo que quiero esclarecer es el hecho de que sin DNI en teoría las firmas no tienen validez legal, por lo que, ningún juez las tomaría en cuenta a la hora de hacer cambios en algún tipo de peticiones.Y change .org no pide dni para registrarse ni firma electrónica. Y no se como corroborar, si change.org realmente ha ayudado a cambiar algo en la sociedad….(por pequeño que sea) yo pido aclaraciones no más dudas, necesitamos trabajar en conjunto para ayudarnos cada día mutuamente. Muchas gracias a quien responda.

  2. Vaya panda de oportunistas Paco Polo y sus compinches… Del artículo de Jorge Izquierdo no explica muchas incógnitas el señor Polo, luego habremos de dar por supuesto que, si bien hay que hacer ciertas puntualizaciones (las de esta carta que damos por buena), el resto del artículo es totalmente cierto, además de los comentarios razonados que escriben otros lectores de La Marea.

    La máxima es: «a ganar dinero a costa de la miseria que se está produciendo y de los ingenuos». Esa actitud fría e insensible es de psicópata, y viendo a personajes como Fabio Gándara en las filas de Change.org, no me cabe la menor duda, visto lo que hizo de DrY con sus amiguetes de la asociación ADRY. Están cortados por el mismo patrón…

    • Totalmente de acuerdo. Leer el artículo de Jorge Izquierdo y luego a respuesta, no rebate a información en ningún punto . No aclara lo del certificado, lo del cumplimiento con la legislación española,, etc. Cuando ni siquiera demuestra la supuesta falsedad de la noticia en puntos concretos rebatibles con datos, es que la respuesta en su generalidad no es cierta y certifica la información dada por Jorge.
      Del artículo y comentarios leídos, creo que la lectura cn que quedarse es que detrás de todo esto en internet siempre hay alguien que lo crea, gestiona y mantiene, que no es algo que crece espontáneamente y por la cara y que todo hay que pagarlo. ¿Cuál es el precio? Cada uno que lo entienda como quiera, desde el simplemente económico hasta el de las libertades personales y colectivas

    • Viendo el rencor, mala baba y envidia de personajillos tan típicos como este creo que Change.org y su gente llegarán lejos…

      • Viendo tu falta de argumentos que contradigan un comentario que no te ha gustado y tu incapacidad para ir más allá de la mera descalificación personal, creo que eres un _______. Saludos.
        P.D. ¿Qué entiendes tú por «llegar lejos» aplicado a Change.org? ¿Ganar un montón de dinero? Porque ése (y no otro) es su objetivo. Entonces estoy de acuerdo contigo, hay mucho borrego como tú dispuestos a hacérselo ganar.

        • Convertirse en una referencia en lo que están haciendo: ayudar a gente a cambiar cosas y a visibilizar problemas antes ocultos. Potenciar el cambio social. Descalificar? Le estoy contestando a una persona que ha utilizado en solo post los calificativos «oportunistas», «psicópata», etc. Qué argumentos ha dado él, por cierto? El tío del artículo se basa en decir que Change es una empresa malvada solo por ser una empresa o en que incumple la legalidad. Pero resulta que según explica Polo, Change sí cumple con la ley y esos beneficios se reinvierten en el equipo y en crecer. Cuál es el motivo para criticar esta plataforma, entonces?

          • ¿Y cómo llamas tú entonces al que se enriquece a costa de este tipo de acciones? ¿Héroe…? No las discuto en sí, ojo. Me parece un método interesante, pero no que a costa de nuestra ingenuidad se enriquezcan unos cuantos. ¿Es eso de oportunistas o no?

            Argumentos hay sobrados para poner en entredicho a esta gente. Jorge Izquierdo en su artículo ha sacado unos cuantos que ni siquiera el señor Polo ha sido capaz de rebatirlos. Ni tú, Juan, tampoco.

            No te equivoques conmigo. Mis razones y «descalificaciones» están más que fundadas porque hablo con conocimiento de causa. Paco Polo es un impostor y sus correligionarios sus cómplices.

  3. Un comentario sobre si las plataformas de este estilo limitan o sustituyen la participación social en otros ámbitos…

    Mi experiencia es que no. Hace unos meses, lancé con una amiga una petición en Change para que sacaran del mercado un juego sexista. Una situación tan concreta ante la que no hubiera tenido mucha capacidad de intervenir desde los espacios feministas en los que milito. Esto no me desactivó para seguir presente en otros ámbitos de participación, más bien me animó a pensar que hay cambios que son posibles y muy tangibles.

    Por mucho que esté radicalmente en desacuerdo con algunas de las campañas que se han lanzado, como las que habéis mencionado, creo que Change suma y no resta. Con lo que no entiendo que hacemos tirándonos piedras contra nuestro propio tejado…cuando hay tantas personas, empresas e instituciones a las que poner en evidencia por motivos muchísimo más obvios.

    • Hola Encina. Por supuesto que al final la decisión de limitarte a firmar peticiones online o actuar además en otros ámbitos depende única y exclusivamente de cada individuo. Lo que yo he comentado es que desde Change.org, sus responsables desincentivan y boicotean cualquier otro tipo de movilización que no sea a través de su plataforma. Animan a que la gente solo canalice su activismo en su web (claro, el resto de formas no les producen beneficios). Luego claro, cada uno de nosotros somos libres de caer o no en la trampa, pero ellos la trampa la ponen, pensando solo en la maximización de sus beneficios y sin importarles el daño que hacen a las causas cuando proponen que solo se actúe firmando peticiones online.

    • ¿Acaso no es Change.org quien tira piedras contra NUESTRO tejado (que no es el suyo) al pretender desactivar todos los canales de movilización social para que se reconduzcan solo a través de su web generadora de lucro?

  4. Un comentario sobre si una plataforma de activismo online puede paralizar otros tipos de participacion social… Mi experiencia es que no. Hace unos meses impulse con una amiga una peticion para q quitaran del mercado un juego sexista. Un tema tan concreto nunca lo hubiera podido promover desde mis espacios de militancia feminista y, sin embargo, eso no me dejo sentada en el sofa, mas bien me siguio animando asobre pensar q los cambios son posibles.
    Para mi Change suma, no resta, con lo q no entiendo muy bien que sentido tiene tirar piedras

  5. Hay que tener mucho cuidado con estos elementos…
    Como ellos mismos saben de la atrocidad de sus ideas, las ocultan para ganar adectos pero al final siempre les sale la vena fascista.
    Siempre se dijo : Que una persona informada vale por dos.
    Y a una desinformada pueden hacerle mucho daño y ella a su vez hacer mucho daño a un pais entero ( vease la mayoría absoluta de los ppfranquistas )

    • Pues anda que ésta otra:

      http://www.change.org/es/peticiones/detengamos-la-cristianofobia

      ¡No tiene delito ni nada! Se pide a las autoridades que defiendan las raíces cristianas de España (= convertir España en un Estado confesional, más aún de lo que ya lo es, claro), también se exige una ley que prohíba todo tipo de burlas a la fe cristiana (=anular la libertad de expresión para la materia religiosa… bueno perdón, solo para la religión cristiana, de las demás puedes burlarte lo que quieras, pero como hagas un chiste de la adolescente zoófila ésa que se quedó preñada de un palomo… ¡a la hoguera!) y para rematar cierra la petición con «¡VIVA CRISTO REY!».

      Oye Francisco, supongo que ésta es una de esas peticiones que se justifican porque vuestro objetivo es «el bien social», ¿verdad? Y además casa de lujo con otras que tenéis por ejemplo a favor de los derechos de los LGTB, que como todo el mundo sabe, son un colectivo que le debe tanto a los de «¡VIVA CRISTO REY!», ¿a que sí?

    • Bueno, bueno, es que es tremendo, ¿que haríamos sin que Change.org defienda constituciones totalitarias e integristas como la de Hungría? ¿Qué sería del mundo y del bien social sin que Change.org facilite que la gente pueda firmar una petición en la que se define como «PERROS» a la gente de izquierdas?

      http://www.change.org/es/peticiones/espa%C3%B1oles-que-apoyan-a-viktor-orban-y-la-nueva-constituci%C3%B3n

      «Apoyamos la nueva constitución de Hungría por que defiende los valores tradicionales y la libertad del pueblo hungaro.»
      «Primeramente apoyamos la nueva constitución hungara.
      Pedimos a Viktor Orban que no ceda ante las presiones de la Unión Europea, ni de la extrema izquierda que son los perros del sistema.
      Los que no representan ningún tipo de valor son la Unión Europea, os animo a abaondonar la Unión Europea.
      Unión Europea = Opresión
      Confiamos en ti Viktor, la gente de bien espera que no nos defraudes y que no te rindas.»

      ***TODAS las faltas de ortografía y léxico están así en el original, lo que da una idea de quien inicia este tipo de peticiones.

      Por favor, Francisco Polo, no paréis de defender el bien social, que peticiones como éstas son imprescindibles para el bien social.

  6. Change como empresa me genera mucha desconfianza y es cierto, como argumenta Héctor, que su búsqueda del máximo beneficio tiende a apostar por la desmovilización y a desarrollar al máximo el concepto de empresa, en lugar del social. Por ejemplo, la decisión de buscar la fórmula para que a la gente solo le lleguen iniciativas con las que más o menos se pueda posicionar me parece un poco dudosa. No sé de entrada si van a crear ficheros automatizados donde se va a catalogar a las personas registradas, algo que no suena nada bien. Pero más allá de eso, es una iniciativa que oculta el fondo de change para que a cada uno nos llegue una imagen de marca diferente y personalizada, algo que desde el punto de vista de marketing es fundamental, es la búsqueda de la empatía con la marca. No me creo que sea una decisión pensada para el beneficio de los usuarios, es una decisión de empresa pensada para atraer clientes y más usuarios, su interés es lucrativo, no humano. El beneficio se traduce en que cuantos más usuarios empaticen, más firmarán, y cuantos más firmen, más iniciativas se contratarán. El factor humano de su discurso me suena más bien a la forma de venderlo para quedar mejor.
    Mi conclusión es que firmar en change es algo que no se va a dejar de hacer y si me llega una iniciativa de Amnistía Internacional que creo importante firmar, no voy a dejar de hacerlo por venir de la mano de Change. Pero sí denunciaré la búsqueda de lucro como principal motivación de Change al hablar de esta plataforma y apoyaré otras más sociales antes que ésta. Y por encima de todo, no caeré en limitar mi lucha a unas firmas desde mi email y trataré siempre de combatir la tendencia inmovilista que pueda promoverse desde change.

  7. Si firmar en change.org sirviese de algo, estaría perseguido.
    Hay que utilizar las redes sociales e internet como medio para la protesta y acción poliítica, no tener el fin de cambiar las cosas desde internet.

  8. Hola Francisco. Pues precisamente yo hablaba de ti en mi comentario en el artículo de Jorge Izquierdo porque justamente fue tu actitud en un programa de Tv lo que definitivamente ennegreció para siempre la imagen que yo tenía de Change.org.
    Pero antes de copiar y pegar lo que escribí allí para que puedas leerlo aquí me gustaría comentar solo una de las falacias de tu texto: hablas de que mantener la plataforma Change.org, su logística así como los recursos humanos necesarios para hacerla funcionar requiere financiación (obviedad de las obviedades) como si alguien hubiese cuestionado que no se obtengan los ingresos necesarios para cubrir los costes. Incluso las organizaciones sin ánimo de lucro recaudan de una u otra forma fondos para cubrir los gastos de su actividad, nadie cuestiona eso. Vosotros vais más allá, no solo pretendéis cubrir gastos sino además generar beneficios (hay ánimo de lucro). También eso es 100% legítimo, al menos yo no tengo ningún problema con ello siempre que se haga de manera honesta, pero ése no es vuestro caso. Y ahora ya sí copio lo que escribí antes:
    El problema es cuando ganar dinero se convierte en la prioridad máxima y a ese objetivo se supedita todo lo demás, sin importar el daño que se cause.
    El problema es cuando las “nobles causas” que hay tras las peticiones no son más que mercancía con la que ganar dinero.
    Recuerdo perfectamente un programa de “Más Vale Tarde” en el que estaba como tertuliano Francisco Polo, director de Change.org en España. Otros contertulios hablaban de la necesidad de que la gente se organice para luchar: en partidos, colectivos, asociaciones o como prefieran, pero que se unan y combinen la lucha en todos los frentes, tanto en la calle como en las instituciones. Francisco Polo dedicó todas sus intervenciones a desincentivar dichas actitudes diciendo que hoy en día gracias a las nuevas tecnologías (se refería por supuesto a su web) ya no es necesario hacer nada de todo eso, que no es necesario unirse ni participar en ningún colectivo, asociación o partido con el que puedes no compartir el 100% de su ideario o programa, sino que es mucho mejor limitarte a quedarte en tu casa firmando peticiones concretas sobre asuntos puntuales.
    Las peticiones de Change.org tienen su lugar y no estoy en contra de ellas, pero lo que no tolero es que pretenda sustituir todos los demás ámbitos de lucha y participación. Están muy bien como símbolo y como complemento, pero no pueden convertirse en la alternativa a la participación directa y personal en política (con peticiones en Change.org no se legisla), en movimientos sociales, en sindicatos, en asociaciones vecinales, en foros y reuniones, en manifestaciones y huelgas, en concentraciones en la calle,….
    Me parece estupendo que exista Change.org pero ese día vi con toda claridad cómo su director está dispuesto a boicotear y desincentivar el resto de formas de participación y movilización social solo para incrementar el beneficio de su empresa y ahí es donde vi que se han vendido. Esa empresa solo tiene un objetivo: maximizar beneficios, y si para ello hay que desmovilizar otras acciones mucho más productivas y eficaces que las peticiones online, pues lo hacen sin remordimientos.
    Afortunadamente el resto de contertulios le callaron semejante idea disparatada (desistir del resto de vías de participación y limitarte a quedarte frente al ordenador firmando peticiones), pero desde entonces no soporto a este tío ni a esta web.

  9. Todo esto de las B-Corps está muy bien si estás alineado con el modelo de la Economía del Bien Común.

    Independentiemente de ello, para mí el modelo más social de empresa que existe es la cooperativa y Change.org Inc. no tiene pinta de serlo. Habrá quien piense que esto es ser muy purista y no lo niego, quizás el fin sí justifique los medios.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.