JxS y la CUP acuerdan desobedecer al TC en el proceso a la independencia

BARCELONA // «El mandato democrático obtenido en las pasadas elecciones del 27 de septiembre se basa en una mayoría de escaños de las fuerzas parlamentarias con el objetivo de que Cataluña se convierta en un Estado independiente con una amplia mayoría soberanista en votos y escaños que apuesta por la apertura de un proceso constituyente no subordinado». Con esta declaración de intenciones comienza la resolución acordada entre Junts pel Sí y la CUP este martes, con la intención de aprobarla en el Parlament.

Un texto que confirma la voluntad de “desobedecer” reivindicada por la formación anticapitalista. De este modo, el llamado procés “no se supeditará a las decisiones de las instituciones del Estado español, en particular el Tribunal Constitucional”, órgano que previsiblemente invalidará la resolución por contradecir la Constitución de 1978.

La respuesta del Gobierno de España no se hizo esperar. «Quienes quieran separar y dividir a Cataluña deben saber que no lo van a lograr», ha declarado el presidente Mariano Rajoy en una alocución institucional esta tarde. «Tienen enfrente la ley y a un gobierno dispuesto a hacerla valer», ha advertido.

El texto acordado declara “solemnemente” el comienzo de la construcción de un nuevo Estado catalán “independiente” con “forma de república” , proceso que será “constituyente” y de carácter “ciudadano, participativo, abierto, integrador y activo”. En cualquier caso, el gobierno que se forme si prosperan las negociaciones no esperará a formalizar una hipotética independencia para obedecer “exclusivamente” las leyes que salgan del Parlament.

“Este Parlament y el proceso de desconexión democrática no se supeditarán a las decisiones de las instituciones del Estado español”, en particular, continúan, del Tribunal Constitucional. De este modo, Junts pel Sí y la CUP cumplen uno de los compromisos que llevaban en su programa electoral. Ha sido la formación anticapitalista quien ha insistido en que el texto de apruebe antes incluso de la elección del president. “Somos un acelerador del proceso”, declaraba el número uno de la CUP, Antonio Baños, días antes del 27-S.