Impresoras 3D para frenar el coronavirus

Guillermo Martínez recibía el pasado 28 de febrero el Premio Social Fundación Princesa de Girona 2020. Con 26 años, este ingeniero madrileño es el fundador de Ayúdame3D, una organización no gubernamental que fabrica prótesis corporales mediante impresoras en tres dimensiones y que entrega de forma gratuita a personas de todo el mundo que no tienen recursos para costearlas. Desde que comenzó en 2017, ya ha entregado 200 prótesis en 40 países de todo el mundo. El día que recibió el premio, por ejemplo, no pudo recogerlo porque se encontraba en Kenia desarrollando un nuevo proyecto que permita a los habitantes del país africano llevar a cabo sus propias prótesis.

Sin embargo, las impresoras colocadas en su habitación –que trabajan durante 24 horas, siete días a la semana– han dejado de imprimir piezas para este tipo de prótesis. Hace unos días, la comunidad maker de todo el país se organizó para intentar imprimir ventiladores asistidos y respiradores automáticos en 3D. “De repente, en Telegram, nos encontramos 600 personas que queríamos ayudar, con todo el caos que ello conlleva. El problema es que esto no evolucionaba porque la logística era muy complicada. Entonces, desde Ayúdame 3D, que es una ong que ya lleva mucho tiempo tiempo funcionando, decidimos realizar pantallas y cascos protectores, que eran mucho más fáciles de llevar a cabo”, cuenta Martínez.

Publicaron un mensaje en redes sociales y, en 24 horas, han recibido 300 peticiones de diferentes establecimientos que solicitan este tipo de materiales. “Nos han escrito desde diferentes lugares de toda España, como farmacias, hospitales, residencias de ancianos… y sitios en los que jamás habríamos pensado que podrían necesitarlo”, explica el joven ingeniero. La organización cuenta con 55 voluntarios, de los cuales una treintena ya se encuentra trabajando en la elaboración de estos instrumentos tan necesarios en un momento en el que el material sanitario escasea en nuestro país.

Según explica Guillermo Martínez, cada máscara tarda en hacerse aproximadamente tres horas. El domingo 22 de marzo harán recuento de todo lo que han podido producir y lo enviarán a los lugares donde lo necesitan. “Esperamos tener por lo menos 200 unidades, que es menos de lo que nos han pedido, por lo que intentaremos repartirlas de forma proporcional”, nos explica. Será la ong la que, con sus fondos, sufrague el gasto que implique la fabricación de este tipo de materiales.

Martínez no descarta la posibilidad de embarcarse en la realización de otro tipo de instrumental sanitario en los próximos días, aunque ahora mismo se encuentran saturados. Por ello no se plantean la impresión de los ventiladores asistidos. El ingeniero considera que el proyecto requiere mucha cualificación y su participación podría entorpecerlo: “Vemos que es algo que se nos escapa de las manos. Creemos que lo mejor que podíamos hacer era apartarnos y ayudar en algo más pequeño pero muy necesario”.

Ayúdame 3D, sin embargo, no es el único proyecto que ha puesto sus conocimientos y sus instrumentos a disposición de la lucha contra el COVID19. ‘La Resistencia Maker’ es la iniciativa que Guillermo Martínez señalaba al principio y cuyo objetivo es encontrar a más usuarios que cuenten con impresoras 3D. El grupo de Telegram Coronavirus Makers cuenta con más de 3.200 miembros. En su web ya se pueden encontrar los primeros prototipos de respiradores autónomos Open Source, un instrumental muy complicado de llevar a cabo y que ya comienza a escasear en los hospitales españoles, provocando en algunos casos que se apliquen criterios restrictivos y de selección de los pacientes que pueden acceder a las UCIs de los centros sanitarios.

Los usuarios de la comunidad maker se han dividido un decenas de grupos diferentes para llevar a cabo diferentes materiales como mascarillas, gafas o artilugios de agarre a nivel internacional, los cuales son también imprescindibles para el personal sanitario, un colectivo que está ingeniándoselas para evitar el contagio en estos momentos.