Sociedad
Un incendio de ‘sexta generación’ con una velocidad nunca vista en Cataluña
El fuego de la Segarra, en Lleida, ha causado la muerte a dos personas y ha arrasado 5.300 hectáreas. Y este miércoles, el calor extremo se ha cobrado la vida de dos personas más, una en Córdoba y otra en Plasencia (Cáceres).
El voraz incendio de sexta generación de la Segarra, en Lleida, que ha causado la muerte a dos personas y ha arrasado 5.300 hectáreas, se ha propagado muy rápido, con velocidades punta de 28 kilómetros por hora, debido al estado del combustible, muy seco, con abundancia de campos de cereales y especialmente por la formación de un pirocúmulo propiciado por la inestabilidad atmosférica. Ahora mismo está estabilizado, pero superó la capacidad de extinción de los Bomberos, dejando registros nunca vistos en Cataluña.
El fuego se produjo bajo «unas condiciones de inestabilidad atmosférica elevadas», y eso propició la formación de estas nubes que surgen a veces de los incendios por la propia columna del mismo y disparan su propagación, ha explicado a Efe el profesor de Ingeniería forestal de la Universidad de Lleida Víctor Resco de Dios.
Ha advertido de que cuando la columna del incendio lleva tanta energía es capaz de condensarse cuando llega a las capas altas, algo particularmente factible en condiciones de inestabilidad atmosférica y es lo que habría provocado que se propagara tan rápido, ha dicho tras referirse a la formación del pirocúmulo o nube de fuegos que activa incendios de «sexta generación».
Según el ingeniero de Montes, la situación en estos momentos es estable pero todavía de «máxima alerta» porque las condiciones meteorológicas son similares y además «existen muchos rescoldos y puntos calientes».
En parte de Cataluña, sobre todo por el norte, se esperan lluvias, aunque habrá tormentas en las próximas horas que serán eléctricas y que pueden generar nuevos incendios, ha asegurado. «La simultaneidad de incendios siempre es el talón de Aquiles de cualquier sistema de extinción, con lo cual hoy es un día de máxima alerta, de máximo peligro», ha advertido el experto.
Un pirocúmulo actúa «como una locomotora, es decir, transforma la energía térmica en cinética, de manera que tira del incendio y multiplica su velocidad«.
Más muertes en la ola de calor
El calor extremo se ha cobrado este miércoles la vida de dos personas, una en Córdoba y otra en Plasencia (Cáceres). La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha informado en su web de que Andalucía, Aragón, ambas Castillas, Cataluña, Extremadura, Comunidad de Madrid, Baleares, Comunidad Valenciana y Navarra permanecen en nivel naranja por temperaturas extremas, mientras que en la Región de Murcia se mantiene un nivel amarillo (riesgo para ciertas actividades).
A lo largo de la jornada, estos valores extremos han llegado a situarse por encima de los 40 grados y han superado los 42 en puntos de Andalucía, como en la provincia de Córdoba.