Greenpeace recuerda que el Algarrobico incumple la ley de costas y está en suelo no urbanizable

MADRID// «Si se produce una sentencia en contra del Tribunal Supremo dejó la profesión». Con esta seguridad se mostraba este martes en rueda de prensa Jose Ignacio Domínguez, abogado de Greenpeace que defiende la ilegalidad del hotel El Algarrobico de Almería.

Este mes de septiembre el Tribunal Supremo tiene que pronunciarse sobre  tres sentencias: la primera, de marzo de 2014 que declaraba legal la urbanización del hotel y dos más sobre el derecho de retracto de la Junta de Andalucía que le permite a ésta quedarse los terrenos.

Domínguez explica que desde Greenpeace tienen la «certeza» de que el hotel es ilegal por dos motivos. El primero es que, al menos la parte de detrás, «invade la servidumbre de protección de costas«, pero es que además, continúa, «está construido en terreno no urbanizable» por lo que la licencia de obras sería ilegal. Asimismo el abogado defiende que «los terrenos legalmente son de la Junta de Andalucía». La propietaria del inmueble, Azata, le pide a la administración 70 millones de euros.

El Algarrobico es el primero de los ocho hoteles planificados en el Cabo de Gata. Sus obras, gracias a la acción judicial promovida por grupos ecologistas, llevan nueve años paralizadas. Se sitúa a tan sólo 14 metros del mar y tiene proyectadas 411 habitaciones. El tamaño del hotel hace que muchos vecinos vean en él un futuro laboral por lo que piden que se finalicen las obras y se ponga en funcionamiento.

Greenpeace, también ha presentado un informe sobre el caso Algarrobico donde desvela el «turbio historial de la promotora Azata del Sol». En su estudio, la organización identifica «hasta ocho casos en los que el conglomerado empresarial de Azata (que incluye hasta 20 empresas) ha realizado operaciones similares a la de El Algarrobico que vulneran la normativa ambiental y urbanística».