Los afectados por las hipotecas celebran frente al Congreso la admisión de la ILP

MADRID // Ha sido más de una hora de indignación ante el Congreso de los diputados hasta que se ha convertido en celebración. Decenas de personas han denunciado la negativa del Partido Popular a admitir a trámite la ILP presentada por los afectados por los desahucios. Sin embargo, de pronto, ha llegado la noticia de que la formación conservadora ha cambiado finalmente su voto. Entonces, el grito ha sido unánime y atronador: “Sí se puede, sí se puede”.

Rafael Mayoral, asesor jurídico de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), considera la admisión de la ILP como una “victoria de la lucha popular” que se viene desarrollando a lo largo de los últimos tres años, una “prueba” de que “la lucha colectiva sirve”. Ahora, toca defenderla para que sea aprobada. “Se ha admitido, pero el próximo paso es rodear la ILP, arroparla desde la calle, por eso es necesario que el próximo 16 de febrero, jornada estatal de lucha, salgamos miles de personas a la calle”, recuerda.

Entre carteles como “Bankia, ustedes tienen ayudas, sus clientes no” o “Banqueros, ladrones, culpables de la crisis”, los manifestantes han festejado que el debate “de mínimos” planteado por la PAH llegue al Congreso. “Es una vergüenza, inhumano, que tantas familias nos estemos yendo a la calle, que esto esté pasando en el siglo XXI”, lamentaba frente al edificio Luisa -nombre ficticio, ya que teme que su nombre llegue a conocidos suyos-, una de las mujeres que hasta el desalojo, hace pocos días, permanecía acampada en la plaza Celenque.

Poco antes, los ánimos se habían ido caldeando, sobre todo cuando se ha conocido la noticia del suicidio de un matrimonio de ancianos, esta misma tarde, que iban a ser desahuciados en Mallorca. “Asesino, asesinos”, han gritado en el momento de mayor indignación, tras guardar un minuto de silencio en homenaje. “Estamos llegando al límite de la vergüenza, y el Gobierno no pone si quiera parches, sólo máscaras”, se desahogaba otra manifestante.

La PAH continuará las manifestaciones, acciones de protestas y acampadas porque aún queda lo más importante: la aprobación de la ley. “De lo que se trata es de que haya un posicionamiento claro contra los desahucios. La propuesta de un más de un millón de ciudadanos no se quería ni siquiera discutir, así que ahora lo que necesitamos es no bajar la guardia para que se acabe aprobando”, alerta Mayoral, que, pese a la aparente cerrazón de las autoridades, se mantiene optimista: “Más tarde o más temprano, la ILP se aprobará, ya que es una propuesta de mínimos. Luego, iremos más allá, porque el derecho a la vivienda sea una realidad”.