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La revolución pasiva que padecemos

El proceso constituyente sigue abierto. No es que no haya llegado o no vaya a llegar, como pretenden hacernos creer quienes todavía piensan en términos del siglo XX. Ya está aquí

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Comentarios
  1. Buen artículo, lo comparto. Se reafirma en la necesidad de un proceso constituyente, diría yo progresista, y en esto es en lo que hay que insistir, por lo que significa y porque esencialmente nos diferencia del resto de organizaciones.

  2. Muy buen artículo. Lo comparto.
    Por suerte se reafirma en cuanto al proceso constituyente que parecía arrinconado, y en esto es en lo que tenemos que insistir, por lo que significa y porque esencialmente nos diferencia del resto de organizaciones.

  3. El artículo es interesante y útil para el momento actual pero estimo que Alberto Garzón ignora/olvida/subestima varios aspectos centrales, a saber:
    Un caso paradigmático de transformismo en la historia reciente de España lo protagoniza precisamente el PCE de Carrillo, que al adoptar acríticamente el Eurocomunismo (malinterpretando, como tantas veces, a Gramsci; y marginando a teóricos marxistas españoles) se adapta totalmente al sistema liberal-capitalista y pierde gradualmente gran parte de su vocación transformadora y revolucionaria. Si IU hubiese corregido esta deriva, y su proyecto político hubiese sido radicalmente emancipador, aspirando a una democracia plena y mediante un proyecto pedagógico no retórico ni dirigista sino real, sistemático, desde la base de una sociedad cuya autonomía debe potenciarse, la formación habría estado perfectamente posicionada para capitalizar el 15M. Lo más preocupante es que las reformas democráticas que propone Garzón, basadas en principios republicanos-socialistas, no son suficientes para aspirar a la transformación de la sociedad. Hay que atreverse a combinar principios marxistas y libertarios, para proponer un proyecto de sociedad emancipada basada en la democracia plena.
    Por otro lado, omite también Garzón que Podemos no es sólo el neopopulismo de su cúpula, que por supuesto tampoco lee correctamente al gran pensador italiano. Lo componen también elementos muy ideologizados, tanto marxistas como libertarios, que abogan por una verdadera democracia plena, de manera que hoy el debate sobre la democracia se da dentro de Podemos, porque IU no llega a aportar un modelo realmente alternativo a la democracia liberal.

    • Excelente y precisa contribución. Garzón realiza un buen análisis crítico de Podemos a colación de Laclau (populismo y significantes vacíos) y de Gramsci (revolución pasiva), sin embargo, es incapaz de explicitar una autocrítica del papel del PC en la transición como usufructuario de esa revolución pasiva que tanto critica Garzón. A lo mejor no se atreve porque perdería apoyo interno a su liderazgo o es que ve a la transición como una mejor solución que la planteada por los grupos rupturistas como paradójicamente también infiere el mismo Errejón. Contradicciones de la izquierda

  4. Se suele traer a colación a mercedes sosa para citar eso de que todo cambia, pero creo que la canción remata con lo contrario: al final dice que todo cambia menos lo esencial, el amor y el dolor de mi pueblo y de mi gente.

  5. No se si mi comentario serfá de utilidad. He tenido vocación política desde muy joven, si bien a la par me di cuenta de que era muy difícil desenvolverse en ese medio. La época de Franco era bastante gris, España estaba llena de chivatos ( recuerden que los del maquis caian básicamente por delaciones ), y era difícil encontrar gente seria y leal. Tal vez como herencia del pasado, encontraba a la gente no de fiar. A la postre eso coadyuvó mi deriva hacia la ciencia, pues es básico ahí dudar por sistema de todo, y de utilidad el uso de lógicas no dicotómicas. Tenemos mucha herencia cultural griega que es interesante históricamente, pero equivocada. Más del 75 % de la enseñanza media estaba controlada directamente por la Iglesia. Sin ahondar más, por abreviar, diré que me han parecido hasta los comunistas imbuídos de espíritu religioso. Comprendo que es difícil sustraerse a ello. Como lo es tener un pie fuera y otro dentro del sistema. Como lo es la coherencia, el sentido de la lealtad, y de la organización. Quiero decir que si no se tiene la cabeza bien amueblada y organizada, vale más dedicarse a otra cosa, pero no a intentar la revolución. Creí ver pronto que ‘el enemigo estaba dentro’, y pude comprobarlo ( la gente es locuaz, y con solo escuchar, interpretar,relacionar y deducir, se entera uno de mucho )tras la muerte de Franco y lo que llamaron ‘transición’. La situación actual era previsible. Porque todo se fragüó en Washington. Los políticos de ‘izquierda’ desactivaron la sociedad, y renunciarona la labor pedagógico-organizativo-activista. Me parece que cada día se preparan las elecciones del futuro. El cambio tiene que estar en uno, y de ahí radiar, y materializarse en la acción. La izquierda renunció a los medios de información, a cooperativas, a la enseñanza alternativa, a ala movilización social permanente, y la gente se ha visto inerme frente al capitalismo consumista arrollador. Al no verse sostenidos por las organizaciones político-sindicales del pasado, caen en la indefensión adquirida y en la inacción. El discurso mediático a lo sumo es su soma, pero mientras tanto, la clase dominante, que conoce bien la situación, avanza en sus planes, porque sabe que la situación está bajo su control. Siento que Podemos haya dinamitado a IU ( ya bastante deshecha por dentro ), porque el resultado de la batalla ya está decidido. Una vez más, será la propia ‘izquierda’ quien va a dar el triunfo a la derecha. Me parece que hay que volver a empezar. No haciendo lo que se ha hecho antes. Un saludo.

  6. Estimado Alberto, Soy militinate de izquierda en Uruguay y ademas Dirigente Sindical de la emrepsa de energia estatal. Como sabras nuestro pais esta transitando un tercer periodo de gobierno de nuestro Frente Ambplio, no ahondo en este tema porque lo conoceras. Comparto y esperaba un articulo de este tenor hace bastante tiempo. Soy un seguidor de la politica internacional, la sigo de cerca y desde el surgimiento de Podemos estaba esperando por lo menos una vision mas objetiva sobre la repercucion politica de Podemos. Comparto el paralelo que planteas con respeco a Gramsci, este articulo desnuda de forma muy atinada las cuencecuencias y el caracter del populismo, no tengo miedo de distinguir a Podemos como un grupo populista que carece de lo que yo llamo un aparato ideologico con pretensiones mucho mas abarcativas, no solo a nivel nacional, sino a nivel internacional. El populismo (izquierda o derecha) es la herramienta politica mas negativa para la generacion de conciencia en la sociedad con intenciones de profundizar cambios sociales verdaderos. Hay una discucion que se da tambien en nuestro pais, y se relacion con el cambio generacional, es decir los jovenes politicos son el futuro, cuestion esta que discrepo totalmente, la revolucion generacional no es biologica, es social e ideologica. Finalmente te envio un abrazo desde Uruguay y gracias por el articulo, era necesario para identificar y aprender un poco mas de la realidad politica en España. Saludos.

  7. Tu mismo has dicho que el cambio está en marcha, así que mientras intentas concienciar a la gente sin caer en el «populismo» las elites cerraran el proceso. Pienso que es bastante importante ganar unas elecciones en el corto plazo y parece que el único partido que puede conseguirlo es podemos. La gente tomaría mucha mas conciencia cuando una vez ganadas unas elecciones vea que su gobierno ahora si la defiende ante los que la quieren estrangular. No podemos pretender generar hegemonía en poco tiempo cuando no se ha conseguido en cuarenta años, así que si se pueden ganar unas elecciones a por ellas!

    • Una respuesta muy profunda y argumentada la tuya, Javi. Yo también entiendo por qué nunca llegaste a votarnos

  8. Excelente este artículo de Alberto Garzón. Sus razones son las mías. Es el momento de cambiar no de forma efímera, sino de la mejor manera para hacer un cambio lo más permanente posible.

    Este supuesto cambio que vemos no hará a nuestros hijos y nietos más libres, sino más esclavos para seguir los pasos del modelo neoliberal que se camufla y se resuelve con grafitis multicolores diciendo que es la revolución del siglo XXI, esa a la que se han apuntado muchos de todo tipo y orientación. ¡ Que poca reflexión ¡
    ¡ Qué modo de consolidar lo anterior bajo falsas premisas de participación popular ¡

    Tenemos aún una sociedad muy poco convencida de que es capaz de cambiar para estabilizar los tiempos futuros; van a la forma fácil de resolver eso que “caspea” y no de apoyar lo que realmente puede transformar de forma más fehaciente el sistema perverso. Hay quiénes se dejan llevar aunque saben que esto es más de lo mismo, y ¡ qué más ¡ y ¡ qué mismo! . Hay quiénes dicen hacer nueva política y se pelea por obtener un puesto con los métodos que reprochaban de los demás.

    ¡ Cada vez peor ! .

    Mayor compromiso, mayor austeridad y mucha mayor solidaridad sin prejuicios y juicios paralelos que es lo que ha aprovechado el enemigo para saldarse con este importante años de oportunidad de cambio real. No habrá otra igual por tiempo imposible de valorar ¿ La vamos a desaprovechar ?

  9. Excelente y profundo análisis, sospecho que en adelante lo que suceda en la izquierda en España va a girar en torno a las ideas vertidas en él. También lo que suceda en ese tan bien definido proceso constituyente.
    Seguimos dentro de un discurso estatalista, en el que el asalto al estado es el tema, mientras que el poder real se concentra en los consejos de administración. Ya está analizado hace tiempo (Habermas, 1970), ese poder desplaza los problemas que genera a la política, donde las herramientas del Estado son insuficientes. La izquierda debe empezar a intervenir directamente en la esfera económica, cuando tiene poder estatal como cuando no. Y desde luego, aprovechar esta ocasión histórica para restaurar las instituciones republicanas de la equidad, principalmente la herramienta productiva de la escuela, desde la que se hará todo lo demás.

    • Me gusto tu comentario necesitamos una revolución al estilo Robín Hood tener nuestra propia ecónomia, generar poder popular de base y autogestionado. Este sistema neoliberal tiene vacios que como poder popular podemos entrar y recuperar hacia un sistema libertario desde ahí podemos hacer un cambio reevolucionario y radical tenemos que pasar de ellos ignorarlos olvidarnos que son ladrones. es perder el tiempo enfrentarse hay que destruir sus bases que es el dinero. Creemos nuestros propias monedas sociales creemos cooperativas de verdad, y esas cooperativas pueden generar políticas nuevas, que mejoren la sociedad; en el fondo una nueva civilización cooperativa democrática.

  10. He de decir que los acontecimientos políticos de los últimos meses (en particular, la subida de Ciudadanos), me han hecho repensar mi posición respecto a la estrategia de Podemos. Pero lo que me ha acabado de abrir los ojos ha sido el artículo de Alberto Garzón publicado en la Marea: “La revolución pasiva que padecemos”. Tras leerlo me ha parecido que ha hecho un análisis extraordinario de la situación política actual y me ha hecho pensar mucho. A continuación lo que he hecho ha sido volver a visualizar el coloquio televisado por el diario.es que entablaron Alberto Garzón y Pablo Iglesias antes de las europeas (se puede ver en youtube). Lo vi en su momento y no le presté suficiente atención como para entender lo realmente importante e interesante de lo que se debatió. Como digo, en esta segunda visualización me he dado cuenta de que lo que se debatió en ese debate-coloquio fue algo primordial, algo que cualquier sujeto interesado en entender lo que está ocurriendo y lo que puede ocurrir en la política española, y sobre todo, cualquier sujeto que esté interesado en conocer cuáles son las formas y estrategias óptimas para lograr subvertir el tablero político y organizar una alternativa que responda a los intereses sociales debería visualizar.
    En ese debate-coloquio se trataron diversos temas, pero el más trascendental desde un punto de vista estratégico fue sin lugar a dudas el de las emociones. Pablo desgranaba la intención y la estrategia que iba a seguir Podemos en el futuro: Podemos salía a ganar, en un contexto de oportunidad histórica, en el cual se daban las condiciones idóneas para que se produjese un cambio político. Y para ganar, según él, es imprescindible conectar con la rabia, las inquietudes, las aspiraciones, y en general, las emociones de la gente. Creo que la clave de la cuestión la pone encima de la mesa un hombre del público en el turno de preguntas, mostrando sus recelos respecto a la utilización de la apelación a las emociones como clave para una posible victoria. La pregunta que planteaba era: “¿cómo evitar que si potenciamos un elemento como la emoción en política en lugar de una razón argumentada, pueda ser utilizada por quien yo creo que lo utiliza mucho mejor, que es la extrema derecha?, es decir, si hacemos que la gente responda políticamente a la emoción, ¿cómo evitar que el día de mañana, igual que hoy te responden a ti, mañana respondan a la extrema derecha?”
    La respuesta de Pablo evidenció algo significativo, y creo que con toda la razón: “el fascismo fue el mejor invento de los poderosos para defender una serie de intereses de clase, pero como regalemos al fascismo la capacidad de emocionar, como les regalemos un factor político tan determinante como la pasión a la hora de hacer política, sabemos perfectamente cuál va a ser el resultado. Hay una lección terrible para todos los socialistas, y es la capacidad movilizadora de la conciencia de clase cuando se tenía que enfrentar a la capacidad movilizadora de lo que representaba una nación. Y prueba de ello es que buena parte de las revoluciones socialistas, se hicieron en nombre de la patria. Eso ocurrió en todos los países del tercer mundo y ocurrió también en Europa. Y es terrible, pero las revoluciones no las dirigen intelectuales ni las dirige gente que pone en primer lugar el sentido común y la reflexión. Yo no le regalaría jamás al fascismo el monopolio en la capacidad de emocionar porque conozco la historia.”
    La última intervención de Alberto Garzón creo que es esencial: “Finalmente una cuestión muy breve respecto a lo de las emociones, que me sumo, pero creo que no es un debate de dicotomía entre razón y emoción. Los dos elementos importan…”
    Creo que es evidente que la apelación a las emociones en la política es fundamental para lograr el cambio político, pero ello no debe significar dejar de lado la razón y la pedagogía política, y pese a que Podemos creo que ha sabido canalizar muy bien las emociones, creo que la estrategia discursiva (el lenguaje político) ha sido errónea. Creo que pese a que en muchos puntos, hay que reconocer un excelente diagnóstico, han pecado de construir un discurso excesivamente vacío, sin contenido ideológico, capaz de canalizar a mucha gente, pero muy débil. Creo que es un discurso muy efectivo a corto plazo, pero que puede ser peligroso y ser utilizado por el régimen en una estrategia de restauración (el fenómeno de Ciudadanos). Esto lo ha explicado a la perfección Alberto en el artículo que he citado antes.
    Por tanto, creo que Podemos debería retocar su estrategia comunicativa y realizar un cambio progresivo del discurso, siendo más pedagógico y utilizando algo más la razón, sin dejar por supuesto de utilizar las emociones. Creo que es la mejor forma de impedir el éxito del régimen en su proceso de restauración. Un discurso que explique mejor la necesidad de no sólo regenerar la vida pública, sino también establecer mecanismos que vayan en favor de la mayoría social y no de los privilegiados. Para ello es imprescindible hacer un ejercicio de pedagogía en el terreno económico que explique que el enemigo es el neoliberalismo, y que la solución pasa por democratizar la economía.
    Finalmente, creo que además, este cambio de discurso propiciaría el acercamiento a otras fuerzas políticas en la conformación de la tan deseada unidad popular.

  11. En primer lugar NO hubo proceso constituyente en 1978 como dice Alberto Garzón, unos señores se reunieron, pactaron (franquistas, comunistas, socialistas, nacionalistas etc) y crearon el engendro que todos conocemos. Y en segundo lugar es una falacia hablar de que se pueda transformar algo desde dentro, no se ha hecho jamás, salvo que se acepte el lampedusismo como alternativa.
    El artículo es farragoso, lleno de citas para aparentar erudición, no caeré en el error de criticarlo usando la misma truculencia vacia, sólo le rogaría a todos los que usan el nombre Gramsci para una cosa y la contraria que se muestren un poco más respetuosos con el gran comunista italiano. Él no entendería a estos partidos servidores de un Estado que a su vez se plega a los dictados de la oligarquía financiera mundial, porque ya no nos oprime unicamente la local. Por último, en aquella disputa que sostuvieron Roxa Luxemburgo y Lenin, en la que ella se debatía entre «Reforma o Revolución», yo comparto la postura de Lenin, Reforma (radical, sin mariconadas) y Revolución.

    • Muy interesante análisis; evidencia las debilidades del discurso populista de izquierdas con precisión. Sin embargo, echo en falta la definición clara de los protagonistas del proceso de cambio. En concreto, ¿dónde queda la clase obrera? Cuando el cambio es realizado por el \»pueblo\», los desfavorecidos, los de \»abajo\», la \»gente\» o la \»ciudadanía\», entonces tenemos un problema de indefinición similar al que se achaca a Podemos. Al final de estos términos sólo se revela uno claramente, el de \»electorado\». Y ya sabemos dónde conduce. La clase obrera y la crisis: recuperar la centralidad del tablero http://www.larepublica.es/2015/04/la-clase-obrera-y-la-crisis-recuperar-la-centralidad-del-tablero/

  12. Me ha encantado el análisis, aunque creo que existe un ‘gris’ entre el ‘blanco’ de IU y Garzón y el ‘negro’ de Podemos.

    ¿No cabe la posibilidad de que Podemos esté empleando ese discurso por puro pragmatismo y obtener la mayoría suficiente para, después, acudir a la anhelada unidad popular?

  13. Brillante análisis, sólo la convergencia de las organizaciones «revolucionarias» (los afectados por la casta), puede propiciar un cambio radical que confluya en un nuevo marco constituyente a favor de los desfavorecidos. Sólo falta que las élites que la dirijan (las cosas no cambian Pér se), se pongan de acuerdo despojándose de toda carga partidaria que dificulte el avance y se sume el pueblo, sin el cual, fracasará toda iniciativa de confrontación al actual sistema. Es decir converger en las elecciones y ganarlas.

  14. Creo que el esquema de diferenciación que planeta Alberto respecto de Podemos es relativamente artificial. El término casta es asimilable al de elites políticas y económicas del régimen que empleamos la izquierda. Respecto de la dicotomía izquierda/derecha, la tesis de Podemos es similar a la idea que propuso Anguita cuando lanzó el Frente Cívico, a saber, que el conflicto principal que cruza a la sociedad no es el de izquierdas derecha, sino el que enfrentaría a los poderes del régimen con la gran mayoría de la sociedad, de manera que se produciría una transversalidad o conjunción de intereses entre ciudadanos que se sienten de izquierdas y aquellos otros que se sienten de derechas, pero que comparten el rechazo a un sistema corrupto y oligárquico. La perspectiva respecto de Podemos la ofrece el análisis del Programa: es ahí donde hay que hacer el análisis y situar su posición respecto del régimen del 78.

    • No creo que Anguita plantee recoger medianas sociales, sino cambiarlas, hay se centra la transversalidad social que no política, provocada por la nueva fractura socioeconómica y relatos en crisis. No se construye sobre significantes flotantes Laclaunianos, que permiten hacer suyo elementos centrales del discurso de Podemos por Ciudadanos.
      Saludos

  15. Amigo Alberto. Atinada reflexión. Pero el proceso constituyente que algunos anhelamos se aleja, día a día, como consecuencia del viaje al centro de algunas de las corrientes políticas y sociales emergentes, con el desmantelamiento del tejido social progresista y el crecimiento de un tejido social conservador y corporativo, con el deslizamiento al centro-derecha político del voto (ejemplo muy claro en Andalucía y quizá se repita algo similar el 24 de mayo, aunque de diferente forma) y con las corrientes neoliberales y religiosas emergentes que invaden la política y la sociedad europea. Mejor no mencionar otros continentes, aunque en un mundo global todo nos afecta.
    Los más jóvenes insistís, con razón, en no pensar políticamente en clave s.XX, sino que debemos situarnos en el XXI. Evidentemente. De acuerdo, pero es en esa clave (la actual) en la que algunos nos situamos para ver algo lejano un proceso constituyente que rompa -realmente- con ataviamos políticos, sociales y religiosos que nos persiguen desde el s.VIII, como mínimo.

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