Los toros vuelven a Morón de la Frontera en medio de la polémica

Un paso atrás en el camino hacia una España sin tauromaquia. Así interpretan los colectivos antitaurinos lo que va a suceder este sábado en la localidad sevillana de Morón de la Frontera. Tras siete años cerrada, la plaza reabre sus puertas para albergar una corrida para la que se ha tirado la casa por la ventana: participarán El Corbobés, Francisco Rivera ‘Paquirri’ y El Fandi.

«Es una apuesta muy importante y llena de ilusión por nuestra parte. La gran afición a los toros en Morón estaba dormida», manifestó el pasado mes de febrero el gerente de Campo Bravo Espectáculos Taurinos, Antonio Sanz, encargado de organizar la corrida, durante la presentación de la misma en Sevilla.

La plaza de toros de Morón de la Frontera fue construida por el anterior alcalde de la ciudad, Manuel Morilla (PP), de quien tomó su nombre. Conocido apoderado taurino, Morilla tiene abiertas varias causas judiciales por, entre otros delitos, permitir vertidos contaminantes, construir ilegalmente su cortijo o destinar dinero público en arreglar un camino privado de una hermandad religiosa. En las elecciones de 2011 dio paso a José Manuel Rodríguez (PSOE), dejando una impronta controvertida: a sus problemas judiciales se sumaron acciones como nombrar alcaldesa honoraria a la Virgen María Auxiliadora o incluso saltar al ruedo a torear, lo que le valió una cogida que registraron las cámaras de televisión, ante el estupor general. Tras su marcha, dejó una deuda de más de 50 millones de euros, una de las más elevadas de la región.

Los colectivos antitaurinos han convocado una protesta a las 16.30 h del sábado, con el lema «Morón vuelve a las matanzas». Asimismo, está en marcha una recogida de firmas que ya ha conseguido más de 2.400 apoyos, y en la que se exige al nuevo equipo municipal «que no consienta esta barbarie». Según explica Juli, organizador de la convocatoria e iniciador de la recogida de firmas, el objetivo es «conseguir el mayor apoyo por parte de la gente». Sabe que no es una tarea sencilla: «En el pueblo se ha levantado una gran polémica: hay gente que literalmente nos quiere matar. Somos conscientes de que durante la manifestación no se van a poner de nuestra parte, y tampoco la Policía».

Juli reconoce que casi ni se acordaba de la última corrida en Morón, por lo que el anuncio le pilló «completamente por sorpresa». Por eso espera que ésta sea la última corrida en Morón, dado que «la gente está cambiando su manera de ver a los animales: cada vez son más quienes creen que la tauromaquia es algo del pasado que hay que dejar atrás».

Un recinto «privado»

Desde el Ayuntamiento de la localidad aclaran que el Consistorio no tiene nada que ver con la corrida. «El festejo no lo organiza ni lo patrocina el Ayuntamiento», aclaran. Sobre la petición de los grupos antitaurinos de que no se permita celebrarla, aseguran: «Lo hemos dicho por activa y por pasiva, tanto en pleno municipal como en declaraciones públicas: no tenemos competencias en ese sentido, ni podemos intervenir en la celebración de un evento que tiene lugar en un recinto privado». Eso sí, desde el Ayuntamiento inciden en que «no se ha aprobado ni un solo euro para este tipo de espectáculos, ni se va a aprobar».