Cientos de manifestantes homenajean a Patrícia Heras en plaza Sant Jaume tras la emisión de ‘Ciutat morta’ en Canal 33

Jesús Rodríguez // El pase en el Canal 33 del documental Ciutat Morta, a pesar de los cinco minutos de censura por orden judicial, ha sido todo un éxito. Se han hecho proyecciones públicas en más de 300 locales distribuidos por toda la geografía catalana y, a la espera de las cifras de audiencia definitivas, seguro que se han superado los 42.000 espectadores que tuvo la emisión de Pa Negre, en el mismo programa Sala 33 de la televisión pública.

Sólo con los pases en centros y ateneos se ha superado la cifra de 10.000 espectadores. Una vez finalizada la emisión por las redes ha circulado como la pólvora la convocatoria de vela con cirios en la plaza de Sant Jaume, en homenaje a Patrícia Heras. Desde la Ronda de Sant Pau se ha hecho una manifestación que ha atravesado el Raval encabezada por la pancarta Basta de brutalidad, bastante de impunidad. Muchos gritos recordaban a Juan Andrés Benítez, Ester Quintana y a las presas anarquistas. La plaza de Sant Jaume conservaba el silencio a pesar de que seguía llegando gente que gritaba «¡4F, ni olvido ni perdón!». Una vez en la plaza, la imagen de los cirios encendidos a las puertas del consistorio congelaba la respiración. En primera fila del acto, los familiares y amigos de Patricia Heras y de Rodrigo, Àlex y Juan.

Con un improvisado equipo de sonido se han hecho los discursos. Mariana Huidobro, madre de Rodrigo Lanza ha tomado la palabra muy emocionada: «Ahora que estamos aquí recuerdo los meses en los que gritábamos que queríamos justicia ante las puertas del Ayuntamiento, pero había un muro, un gran muro, que no podíamos atravesar. Nunca me hubiera imaginado que podríamos llegar hasta donde estamos ahora, gracias a todas, gracias a toda la gente preciosa y bonita que nos ha ayudado».

Sílvia Villullas, amiga de Patrícia Heras ha hablado entre lágrimas. «Pienso en el pasado, pero pienso también en el futuro y ahora pienso en las compañeras anarquistas que están presas. Estoy muy emocionada y todo ello me lleva a pensar en Patri y, aunque yo pensaba que estaba muy lejos, está más cerca, está aquí con nosotros. Gracias a todas vosotras por estar con nosotras aquí».

Xavier Artigas, codirector del documental, ha aprovechado para recordar que el caso 4-F no se acaba aquí y que mucha gente todavía tiene que responder cuestiones que están sobre la mesa: «¿Cómo puede ser que los agentes condenados por torturas tengan jubilaciones vitalicias de hasta 1.800 euros? Nos lo tiene que explicar Xavier Trias «. En nombre del conjunto de familiares y amigas de las principales víctimas del caso ha reclamado que se investigue todo de nuevo y que se reabra el proceso judicial. Eran las tres menos cuarto de la madrugada cuando se ha dado por desconvocada la concentración. Los cirios y las velas, sin embargo, han seguido prendiendo y alumbrando a las puertas del Ayuntamiento de Barcelona.

[Artículo publicado en La Directa]