Pablo Casado en la sede del Partido Popular en Génova durante las elecciones generales de noviembre de 2019. REUTERS/Jon Nazca
El presidente del Partido Popular, Pablo Casado, ha intervenido este martes en la reunión del Comité Ejecutivo Nacional del PP para valorar los «malos resultados» en las elecciones catalanas. Durante su comparecencia, ha anunciado la decisión de abandonar la histórica sede del partido en Génova. «Considero que no debemos seguir en un edificio cuya reforma se está investigando esta semana en los tribunales», ha dicho, en referencia a la presunta remodelación pagada con la caja B del PP en 2007.
El juicio sobre la caja B de la formación comenzó el lunes 8 de febrero. Aunque su reanudación estaba prevista para este martes, los interrogatorios a Luis Bárcenas, tres responsables de la empresa Unifica –encargada de la reforma de la sede– y el exgerente del PP Cristobal Páez tendrán que esperar por el positivo en covid-19 de este último.
Sobre este movimiento para desvincularse de la corrupción, Casado ha añadido que «hay que dejar de preocuparnos por el pasado y preocuparnos por el futuro que proponemos para los españoles». «Las hipotecas en política no son hereditarias. No lo han sido para ningún otro partido y no deben serlo para el nuestro», ha añadido.
«Cualquier conducta no ejemplar no forma parte del patrimonio a defender del PP»
En su intervención, el líder de la oposición ha explicado también que la dirección del partido va a evitar hablar de Luis Bárcenas y «no va a volver a dar explicaciones sobre ninguna cuestión pasada que corresponda a una acción personal que no haya sido en beneficio del partido o incluso haya podido pejudicarle». «Defender al partido no es justificar las conductas individuales que hayan podido cometer personas concretas al margen de los órganos de dirección y del interés de los afiliados», ha señalado Casado.
También ha anunciado la creación de un departamento para establecer mecanismos de transparencia.