Rajoy defiende su honradez personal pero no habla de otros dirigentes del PP

MADRID // “No temo a la verdad, no tengo nada que ocultar”. El presidente del Gobierno Mariano Rajoy se ha defendido de forma vehemente de las acusaciones de haber cobrado sobresueldos en dinero negro. “Es falso”, dijo el líder del Partido Popular hoy en su intervención televisada ante el Comité Ejecutivo Nacional, reunido en sesión extraordinaria en la sede de la Calle Génova, otra vez blindado por la policía. Como se había anunciado, no hubo rueda de prensa.

Rajoy centró el discurso en su persona, su honorabilidad personal y una defensa genérica de la política como “una actividad noble y digna”. El presidente anunció que la semana que viene publicará sus declaraciones de la renta y de patrimonio en la página web de La Moncloa para demostrar su inocencia. “Nunca he recibido ni repartido dinero negro”. El jefe del Gobierno aclaró que antes de meterse en política ganaba más dinero. “No he venido a la política a ganar dinero (…), pero el dinero para mí no es lo más importante en la vida”, dijo.

«Es falso», repitió tres veces en referencia a las informaciones sobre la caja B y dejó claro que no piensa dimitir.

El presidente también defendió a su partido, aunque con bastante menos contundencia que cuando se refería a si mismo. “En este partido no se pagan cantidades que no figuran en la contabilidad”, aseguró, “todas la retribuciones se ha ajustado a la legalidad todos estos años”. Rajoy eludió, sin embargo, referirse a ningún otro dirigente en particular, tampoco a la ministra de Sanidad, Ana Mato, acusada de haber recibido regalos de la trama Gürtel. Mato y su exmarido, el exalcalde de Pozuelo, Jesús Sepúlveda, negaron el viernes por la noche los datos publicado en un informe policial. El PSOE ha pedido la comparecencia de la ministra en el Congreso.

Rajoy tampoco se refirió directamente a Luis Bárcenas, salvo para desmarcarse de la cuenta oculta en Suiza del extesorero del PP. “El partido no tiene ni ha tenido cuentas en el extranjero”, dijo el presidente. El líder popular no se pronunció sobre el origen de las donaciones que constan en los supuestos papeles de Bárcenas.

Al igual que han hecho otros dirigentes del PP desde que el diario El País publicó la presunta contabilidad paralela que da fe de pagos a varios altos cargos del partido, Rajoy prometió “máxima transparencia” y profundizó en la teoría de conspiración para “dañar la imagen del partido, del Gobierno y de España”. “Los españoles a los que se pide muchos sacrificios tienen el derecho de saber que están gobernados por personas honradas e íntegras”, manifestó Rajoy, a la vez que arremetió contra “el fariseísmo descarado de quiénes creen poder ganar algo con esto”, con mención especial al líder socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba.

Esta promesa de transparencia, de momento, parece limitarse a la auditoría interna que está llevando a cabo la tesorera del PP, Carmen Navarro, y que se someterá a otra auditoría externa. “Este partido sabe defenderse y no vamos a quedarnos con los brazos cruzados”, anunció Rajoy. A pesar de que los dirigentes populares llevan dos días amenazando con emprender acciones legales, por ahora el único que ha presentado una querella ante la Justicia es el expresidente José María Aznar, que ha demandado a El País por la violación del derecho al honor.

IU pide la dimisón de Rajoy

Mientras, el líder de Izquierda Unida, Cayo Lara, anunció que trasladará al próximo debate sobre el estado de la nación una reprobación al Gobierno y pide apoyo para una iniciativa que exige la dimisión del presidente.