Internacional
Israel anuncia la creación de “un Estado judío” en Cisjordania
Después de que Emmanuel Macron hablara de reconocer el Estado palestino, el Gobierno israelí afirma que eso es «sólo un papel que será arrojado a la basura».
Israel responde a cada declaración contra el genocidio palestino con una nueva amenaza. El presidente francés, Emmanuel Macron, habló de estudiar la posibilidad de reconocer el Estado palestino (se rumorea que lo hará el mes próximo) y la respuesta no se ha hecho esperar: «Tenemos un mensaje claro para Macron y sus amigos: ellos reconocerán el Estado palestino sobre el papel y nosotros construiremos un Estado judío aquí [en Cisjordania] sobre el terreno», dijo el ministro de Defensa Israel Katz.
Katz hablaba desde el puesto de avanzada de Sa-Nur, un asentamiento al norte de Cisjordania. Su visita formaba parte de la propaganda gubernamental de nuevos asentamientos judíos en zona palestina. Se han proyectado concretamente 22 nuevas colonias. La organización Peace Now considera esta medida como la más extensa de su tipo desde los Acuerdos de Oslo de 1993, cuando Israel se comprometió a no crear nuevos asentamientos, considerados ilegales por el derecho internacional. Según vaticinó Katz, el reconocimiento por parte de Francia del Estado palestino es «sólo un papel que será arrojado a la basura».
La excusa del antisemitismo sirve a los dirigentes israelíes para desacreditar cualquier postura contraria a la sistemática matanza de palestinos en Gaza. Al presidente Macron, quien ha pedido a la Unión Europea un endurecimiento de su postura por la situación humanitaria en la Franja, han llegado a acusarle de emprender una «cruzada contra el Estado judío». En un comunicado con importantes dosis de paranoia, el Gobierno de Israel coloca a todos los europeos como aliados de Hamás. «En vez de ejercer presión sobre los yihadistas –dice en un escrito difundido hoy–, Macron quiere recompensarles con un Estado palestino». Como remate pretendidamente jocoso, la diplomacia israelí aseguraba en su comunicado que «no hay ninguna duda de que la fiesta nacional» propuesta por Emmanuel Macron «será el 7 de octubre», el día de los ataques de Hamás en 2023.
Dejando al margen esta provocación, la actitud del presidente francés es importante por cuanto Francia, junto con Alemania, era hasta hace poco uno de los países que más ha apoyado a Israel, incluso en mitad de la masacre gazatí. Eso está cambiando. El mismo canciller Friedrich Merz aseguró que la ofensiva en Gaza «ya no puede justificarse como una lucha contra el terrorismo de Hamás». Macron, en una visita a Singapur este viernes, insistió en que si los occidentales «abandonan Gaza» y «dejan hacer a Israel», corren el riesgo de «perder toda credibilidad ante el resto del mundo». Su argumento es idéntico al utilizado por el presidente español, Pedro Sánchez, a la hora de afrontar la crisis de Gaza: «Rechazamos la doble vara de medir», dijo Macron en referencia al apoyo recibido por Ucrania tras la invasión rusa.
Además, en un ejercicio de desinformación, el Gobierno de Israel afirmó que no existe ningún bloqueo de la ayuda humanitaria en Gaza. Afirma que han entrado 900 camiones en la Franja desde el lunes y acusan a Naciones Unidas de no repartir su contenido. Por su parte, Jens Laerke, portavoz de la oficina de coordinación de asuntos humanitarios de la ONU, declaró que Gaza es hoy «el enclave más hambriento del mundo» y que el «100% de la población está amenazada por la hambruna».
Mientras tanto, el goteo de muertos no cesa: la cifra de asesinados en la Franja desde el inicio de la ofensiva israelí superó hoy los 54.000.
Los que crearon Israel estan preocupados por la inestabilidad que estan creando los sionistas, recurriran a la «justicia» judia para salir del atolladero que les esta costando mucho.