Salvador Illa, nuevo ‘president’ de una Catalunya que da por finiquitado el ‘procés’

El candidato del PSC, Salvador Illa, ya es el nuevo presidente de la Generalitat de Catalunya. A pesar de que, durante toda la jornada, el protagonismo se lo robaron el expresident Carles Puigdemont y la incertidumbre en torno a su posible detención, después de que reapareciera en Barcelona durante unos minutos para dar un discurso ante sus seguidores. Como estaba previsto, Illa ha obtenido el apoyo del Partit dels Socialistes de Catalunya (PSC), Esquerra Republicana (ERC) y los Comuns. Lo que le otorgo los 68 votos necesarios para tener la mayoría absoluta.

Comienza así una nueva legislatura y finaliza el ‘procés’. La idea, que flota desde hace días en tertulias de todo tipo de medios y también de manera implícita en los discursos políticos, se ha convertido en sentencia durante la intervención de la portavoz de la CUP, Laia Estrada, que, sin embargo, también ha querido dejar claro que el independentismo no se acaba.

“Pido la aplicación ágil, rápida y sin subterfugios de la ley de amnistía”

Illa comenzó su discurso de investidura pidiendo respeto para el poder legislativo y “la aplicación ágil, rápida y sin subterfugios de la ley de amnistía”. Además, señaló que “Catalunya forma parte de un espacio plurinacional, que es España; y también de un espacio público compartido, que es la Unión Europea. Y es ahí donde debemos estar”.

El ya president aseguró respetar profundamente otros planteamientos, “pero el mío”, explicó, es el de la “Catalunya que quiere convivir con su propia lengua como columna vertebral de nuestra nación. La que se implica en la construcción de una España y una Europa federal. Ese es el mejor planteamiento, porque garantiza el bienestar de los ocho millones de catalanes y catalanas”.

“La Generalitat quedará supeditada al dictado de Madrid”

Fue el portavoz del grupo parlamentario de Junts, Albert Batet, el que intervino en representación de la formación de Carles Puigdemont. Y afirmó que, con Illa, Catalunya “sufrirá una desnacionalización y que la Generalitat quedará supeditada al dictado de Madrid”.

En su opinión, van a tener “un presidente españolista, porque el proyecto de Illa es España. Pero somos la nación sin Estado más grande de Europa. No han podido aniquilarnos y no lo harán con la investidura de un presidente españolista y menos con la persecución a Puigdemont. Catalunya volverá a levantarse una y otra vez”, ha asegurado Batet, quien solicitó hasta en dos ocasiones la suspensión del pleno de investidura. La Mesa del Parlament, no obstante, ha rechazado la petición.

Puigdemont sigue desaparecido

Pero el verdadero protagonista de este Debate de Investidura, sin pisar por el Hemiciclo (al menos, que se sepa), fue Carles Puigdemont. El expresident reapareció durante unos minutos, casi siete años después de marcharse “al exilio”. Cumplía así una promesa electoral, aunque solo a medias, ya que ha regresado a Barcelona, pero ha vuelto a desaparecer poco después de pronunciar un discurso ante sus seguidores.

Al final de esa suerte de mitin, Puigdemont, algo nervioso y muy cerca del Parlament, dijo: “No sé cuándo nos volveremos a ver”. Y, hasta el momento, sigue sin saberse, puesto que el expresident está en paradero desconocido.

Poco después de su supuesta nueva huida, los Mossos activaron la denominada Operación Jaula. Más tarde, se conoció la detención de un mosso, el propietario del vehículo en el que se habría marchado Puigdemont. A última hora de la tarde, se informaba de la detención de un segundo mosso.

“No nos vamos a rendir”

Durante todo el día, Junts jugó a esparcir dudas sobre una posible aparición de Puigdemont en algún momento del Pleno. De hecho, la presidenta del partido, Laura Borràs, ante la pregunta formulada por La Sexta de ¿dónde está Puigdemont?, ha repetido en dos ocasiones que “lo veremos pronto”, aunque no desveló cómo.

También Batet sembró la incertidumbre en su intervención. El portavoz señaló que “esperemos que antes de que acabe el Pleno, el president Puigdemont pueda ejercer su derecho como diputado electo del Parlamento”.

Batet agradeció su papel “a los miles de ciudadanos que han participado en el retorno de Puigdemont a Catalunya”.

Y recordó el 1 de octubre, indicando que el referéndum celebrado el 2017 fue “un hecho relevante, que marca un antes y un después. Y nosotros no renunciaremos a él en ningún caso. No nos vamos a rendir”.