La CUP no investirá a Mas y pide a JxS mover ficha para evitar elecciones

El arduo proceso negociador entre al CUP y Junts pel Sí (JpS) parece haber vivido este domingo uno de sus últimos episodios: la formación anticapitalista ha decidido, por una diferencia de sólo cuatro votos, que sus diputados presentes en el Parlament no investirán al president en funciones, Artur Mas, para un nuevo mandato al frente de la Generalitat de Catalunya.

En rueda de prensa, la diputada de la CUP en el Parlament Gabriela Serra ha pedido al president que dé un paso al lado. «Quien quiera mover pieza aún tiene días, no está convocado nada», ha enfatizado. Serra ha querido desvincular el proceso independentista de los resultados del 27-S, que continuará «con o sin investidura de Mas», ha asegurado.

O Mas o Març

La cuestión no ha girado sólo -y al mismo tiempo sí lo ha hecho- en torno a un nombre: de la decisión tomada hoy dependía la probable celebración de nuevas elecciones en la Comunidad Autónoma, después de que JpS haya repetido que no contempla un candidato que no sea Mas. La CUP ha tratado durante las últimas semanas que se encontrase a una persona de consenso, opción vetada por la candidatura que engloba a la antigua CDC y a ERC.

Este domingo se ha superado, por tanto, en este nuevo cónclave de los anticapitalistas, la situación de bloqueo que se generó hace una semana, cuando en asamblea se llegó a un empate -con exactamente 1515 votos para cada una de las dos opciones- sobre si la formación apoyaría o no a Mas. El resultado de la multitudinaria reunión, aseguran los cuperos, pilló a la organización asamblearia por sorpresa.

En esta ocasión la reunión ha sido más reducida en cuanto a miembros, ya que ha correspondido hallar la fórmula de desbloqueo al Consell Polític, formado por 57 representantes de las 13 asambleas territoriales de la CUP y 11 miembros del Grup d’Acció Parlamentaria. En total, 68 personas con derecho a voto.

En la reunión han estado presentes también los diputados de la formación en el Parlament, que, pese a que han podido intervenir, no han tenido derecho a voto. Incluso dentro de este grupo ha habido disenso en torno a la cuestión de qué hacer con la investidura. Mientras que en el caso de Josep Manel Busqueta y Anna Gabriel, esta última principal cara visible de la corriente Endavant, la oposición a Mas ha sido total, en el de otros como Antonio Baños o Albert Botrán la inclinación ha sido por el sí.

Última actualización: 17.53 horas.