La ministra Tejerina y las urnas peligrosas

La ministra Tejerina, que lo es de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, no había tenido hasta la fecha manifestaciones públicas que llamaran la atención, por eso resulta en verdad significativo que en vísperas de la entrada en vigor de la Ley de Seguridad Ciudadana y la reforma del Código Penal, Isabel García Tejerina se haya servido del referéndum en Grecia para asegurar que las urnas son peligrosas.

Lo dijo en una entrevista emitida por Antena 3 y es una demostración, una vez más, no de que la política de comunicación del Gobierno sea mejorable -como diagnostica don Mariano el Plasmado-, sino de que esta gente -votada, no lo olvidemos, por una mayoría de la población- suma a su ineptitud un cúmulo de asesoramientos nefastos o equivalentes.

Además de abominar según parece de las urnas -máximo símbolo de la representación democrática popular-, la ministra Tejerina cree que cada español tiene una deuda individual con Rajoy, por haber evitado –según ella- una situación como la que vive Grecia. Con estas palabras añade Tejerina, a su recelo a las urnas, el desfachatado comportamiento de sus colegas de gabinete tratando de culpar a Syriza de lo que se trabajaron antes los partidos que gobernaron en Grecia al dictado de la Troika.

¿O es que acaso olvidamos que don Mariano el Simple viajó el pasado mes de enero a Atenas para apoyar al primer ministro conservador Antonis Samarás en las elecciones que finalmente dieron la victoria a Syriza, porque así lo establecieron las peligrosas urnas tras el desastroso gobierno de coalición presidido por el propio Samarás y en el que también estaba representado el Partido Socialista Griego?