El Sindicato de Estudiantes cifra el seguimiento de la huelga entre el 75 y el 90%

Entre el 75% y el 90% de los estudiantes de instituto y universidades, dependiendo de las comunidades autónomas, no ha acudido este jueves a clase en protesta por el rechazo de la nueva normativa que rebaja los grados a tres años, según ha valorado el Sindicato de Estudiantes sobre la segunda jornada del paro de 48 horas convocado contra el decreto 43/2015, conocido como el 3+2. A las protestas también se han sumado otros colectivos en lucha como el de afectados por la Hepatitis C y los trabajadores despedidos de la fábrica de Coca-Cola en Fuenlabrada. Más de un centenar de ciudades españolas han sido escenario de protestas.

Lemas como “Universidad, pública y de calidad”, “el hijo del obrero a la universidad”, y gritos de “dimisión” dirigidos hacia el ministro de Educación, José Ignacio Wert, se han coreado en las marchas. Sus participantes critican que la reforma impulsada por Wert implicará un incremento notable del precio de los estudios, al acortar los plazos de los grados y alargar el de los másteres, más caros. Además, denuncian que se ha llevado a cabo sin contar con el consenso de la comunidad educativa.

La jornada de huelga se ha desarrollado con apenas pequeños incidentes puntuales. En la Puerta del Sol, al finalizar la marcha madrileña, se ha producido un breve enfrentamiento cuando un joven encapuchado ha encendido una bengala y los estudiantes encargados de velar por la seguridad de la manifestación han tratado de apagarla. Agentes antidisturbios de la Policía Nacional han intervenido para separar a los dos grupos, sin mayores consecuencias. Los estudiantes de la Comunidad de Madrid han acordado celebrar un referéndum entre la comunidad universitaria entre los días 10 y 12 de marzo para dirimir el nivel de apoyo a la aplicación del decreto.

Ocupado el rectorado de la UB

En Barcelona, donde cerca de 6.000 estudiantes han participado en la manifestación, se ha cortado la Avenida Diagonal durante un cuarto de hora, y al finalizar la marcha, varias decenas de estos han entrado en el rectorado de la Universidad de Barcelona (UB), para unirse al grupo de jóvenes que ha pasado allí la noche para forzar un posicionamiento del rector sobre la cuestión. El seguimiento de la huelga en la capital catalana ha sido desigual en los distintos centros. Así, mientras en el campus del Raval de la UB y las instalaciones de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) apenas han acudido estudiantes, en la Universitat Politècnica de Catalunya (UPC) la jornada ha transcurrido bajo los parámetros habituales.

En contraste con la calificación de “éxito” de los sindicatos estudiantiles, desde el Ministerio de Educación se ha asegurado que el seguimiento del paro ha sido “insignificante”. La secretaria de Estado de Educación, Montserrat Gomendio, ha señalado que esa escasa participación se debe a que los motivos de la protesta “no se corresponden con la realidad”.