Es un honor contarte que Endesa…

En los últimos años Endesa ha dado, al menos, cuatro noticias de carácter económico de primera magnitud. En 2009, la eléctrica española pasó a estar controlada por la italiana Enel, participada por el Estado italiano. En septiembre de 2014, Enel compró a Endesa sus activos en Latinoamérica. En octubre, Endesa anunció el reparto de un impresionante dividendo de más de 14.000 M€, para lo cual tuvo que endeudarse, lo que en la práctica no supone más que un vaciamiento de la eléctrica que solía ser española (cuando era pública) en favor de Enel. Finalmente, a principios de noviembre la CNMV aprobó una Oferta Pública de Venta de Endesa, con la cual Enel trataba de vender alrededor del 20% de su filial.

Aquí nos centraremos en la ambiciosa campaña publicitaria de Endesa para animar a la compra de sus acciones, protagonizada por dos conocidos periodistas, que en algún momento llegaban a usar casi literalmente¹ las palabras que constituyen el título de nuestro artículo. Durante la campaña, nos contaron que Endesa «tiene plena confianza en nuestra tierra y en nuestras gentes»², que «cree en la energía de este país»³ y, en particular, «apuesta por tu energía»³. Poco puede decirse acerca de afirmaciones etéreas como estas, aparte quizá de señalar su cursilería. Pero la cursilería no es un pecado grave. Sin embargo, en la campaña se hicieron afirmaciones cuya verdad o falsedad puede y debe ser analizada. En ella se nos dijo que Endesa:

• Quiere «arrimar el hombro»³ al «esfuerzo colectivo de recuperación en el que estamos inmersos»² y «poner todo de su parte para contribuir a una recuperación sólida»⁴.
• Por ello, «va a concentrar sus inversiones aquí, en este país, para ayudar a crear riqueza y bienestar»³.
• Además, «se alía con otras compañías para afrontar con inteligencia y con innovación los grandes retos energéticos de este país»⁵.
• Por eso está «en el impulso de la eficiencia energética y está en el desarrollo de las ciudades inteligentes»⁵; está en producir electricidad «de manera eficiente y sostenible»⁶.
• Todo esto «lo hace pensando en ti, en tu familia, en el presente que estamos superando y en el futuro que estamos construyendo entre todos»³.
• Y no sólo eso, sino que además «tiene una atractiva política de dividendos porque, además de una compañía energética eficiente, considera que hay que corresponder a la confianza que los inversores depositan en ella»⁷.

Pues bien, nosotros replicamos que:

• El alto precio de la electricidad en España, fijado en un mercado eléctrico controlado por un oligopolio del que Endesa es parte, afecta a la competitividad de las empresas y al bienestar de los ciudadanos, y por tanto a la recuperación del país.
• La referencia a la concentración en España (como si fuese voluntaria) es de un cinismo sobresaliente. Endesa se concentra en España porque sólo le queda negocio en la Península Ibérica tras la venta de sus activos americanos a Enel. De hecho, el Consejero Delegado de Enel declaró recientemente en Latinoamérica: “El crecimiento está aquí […] no creo que vayamos a invertir mucho más en Europa”.
• En cuanto a aliados, Endesa, junto con Iberdrola, Gas Natural-Fenosa, E.ON España y EDP, forma parte de UNESA, la patronal del sector eléctrico; su presidente ha llegado a decir que “de todas las pobrezas, la pobreza energética probablemente no sea la más acuciante”. Y con respecto a la innovación, el presidente de Endesa ha declarado que las renovables son “un lujo inabordable” en lugar de una oportunidad para el país de cara a generar empleo de calidad, acabar con la dependencia energética y el déficit exterior.
• UNESA propone medidas que impiden el autoconsumo eléctrico, una de las tecnologías eléctricas más eficientes, ya que acerca el lugar de producción al de consumo evitando pérdidas. La excusa de pagar el conocido déficit de tarifa (del que miles de millones corresponden a Endesa) ha paralizado la construcción de centrales renovables (y en general cualquier medida de eficiencia energética) y Endesa opta por alargar la vida de sus centrales nucleares.
• Solo en 2012, Endesa cortó el suministro de electricidad a medio millón de hogares. La sede de Endesa fue uno de los edificios tomados por la Alianza Contra la Pobreza Energética, con participación de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca, para exigir soluciones.
• En cuanto a su generosidad con los dividendos, repetimos que se trata de una decisión de su accionista mayoritario y mayor receptor de estos dividendos, Enel, como parte de una estrategia de “descapitalizar y endeudar a Endesa”.

Aparte de todo esto, los periodistas empleados por Endesa, y quienes prepararon sus discursos, olvidaron de mencionar algunos elementos, que un juez les obligó a incluir en su propaganda: «Endesa está controlada en un 92% por el grupo semipúblico italiano Enel, cuyos intereses pueden entrar en conflicto con los de la empresa española. Este y otros importantes factores de riesgo como la reducción de su crecimiento potencial y una deuda con la que antes no contaba, se recogen en el Folleto informativo de la Oferta Pública de Venta de Acciones disponible en la página web de la CNMV».

Que una empresa oculte la verdad, por evidente que sea, o deforme los hechos en su beneficio es algo que muchos tenemos bastante interiorizado y vemos como normal, aunque deberíamos empezar a preguntarnos qué tipo de normalidad es esa. Sin embargo, en este artículo hemos querido prestar atención a los mensajeros. Se habla mucho en los últimos tiempos de la casta, que se ha definido en alguna ocasión como “una parte fundamental de la clase política que trabaja al servicio de los poderes económicos y en contra de los intereses de la mayoría y disfrutando de unas condiciones de privilegio”. Sin embargo, aunque es posible que la simplificación resulte útil en determinados ámbitos, no solo ciertos políticos traicionan la confianza de los ciudadanos defendiendo los intereses privados de grandes empresas en lugar del interés público. Hay personas fuera de la órbita política traicionando el espíritu de su profesión del mismo modo que lo hacen algunos políticos, y sin embargo son señalados con una frecuencia infinitamente menor. En estas líneas hemos aprovechado el brutal ejemplo proporcionado por un medio de comunicación (el que aporta el tiempo de radio) y dos periodistas. Un medio y dos personas cuya misión, supuestamente, es elaborar, interpretar y ofrecer información veraz a la ciudadanía. Estas mismas personas te han hablado y te continuarán hablando, desde otros programas de radio y televisión, de guerras, rescates bancarios, recortes y recuperación económica. También, como en la publicidad que hemos analizado, lo hacen y harán a cambio de un sueldo. Y entonces, ¿les vas a creer?

*José Luis Velasco e Iván Calvo son miembros del Observatorio Crítico de la Energía y colaboran con el Círculo Economía, Ecología, Energía de PODEMOS

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Las declaraciones entrecomilladas se pronunciaron en el programa “Hoy por hoy”, de la Cadena Ser, entre el 27/10/14 y el 19/11/14 en el tramo de 07:00 a 08:00 (desde el 27/10 hasta el 07/11 las hizo Matías Prats; desde el 08/11 hasta el 18/11, Fernando Ónega; después, hasta el 21/11, fueron repeticiones). Las alocuciones comenzaban aproximadamente a las 7:45, tras la sección “El Ojo Izquierdo”, dedicada a repasar los titulares de la prensa más conservadora. Los extractos corresponden a las siguientes fechas:

¹ Programa del 6 de noviembre de 2014.

² Programa del 12 de noviembre de 2014.

³ Programa del 27 de octubre de 2014.

⁴ Programa del 30 de octubre de 2014.

⁵ Programa del 29 de octubre de 2014.

⁶ Programa del 4 de noviembre de 2014.

⁷ Programa del 14 de noviembre de 2014.