Las juventudes del PSOE guardan silencio con la mirada puesta en Madina

MADRID // Desde la semana pasada, las juventudes del PSOE se están moviendo sin dirección clara, supeditadas a los bandazos que está dando la ejecutiva del partido. El 26 de mayo, la dirección, a través de Rubalcaba, anunció un congreso extraordinario para elegir nuevo secretario general, tras el batacazo electoral que sufrió el partido en las elecciones europeas del 25 de mayo. Ese mismo día, sectores de las Juventudes Socialistas se pusieron en marcha para exigir que este congreso se celebrara después de unas primarias abiertas.

En él, reclamaban elegir el próximo candidato a la presidencia del Gobierno y no antes, como había fijado la directiva nacional del PSOE. Se lanzó, incluso, una petición a través de la plataforma change.org para solicitar la dimisión de la actual dirección del partido (el “aparato rubalcabista”, en palabras de los más críticos con la gestión del partido) y que fuera una gestora la que se encargara de realizar las primarias abiertas y, posteriormente, un congreso federal para elegir al nuevo secretario general.

De forma paralela, comenzaron a alzarse voces críticas con que el nuevo líder fuera elegido a través de delegados. Y, de nuevo, parte de las juventudes se unieron al movimiento #1militante1voto, que pide que esta elección sea hecha mediante la votación de todos los militantes del partido.

La dirección de las juventudes socialistas no se ha movido al mismo ritmo. De hecho, no ha sido hasta después de que Eduardo Madina y la dirección del propio partido se hayan posicionado a favor de la propuesta “un militante, un voto” cuando ha levantado la voz. El jueves 29 de mayo, el secretario general de Juventudes Socialistas, Nino Torre, pidió que se garantizara el voto de todos los militantes en esa elección, según Europa Press.

La dirección de las juventudes socialistas transita a rebufo de las decisiones que se toman en Ferraz, y con especial atención a los movimientos de Eduardo Madina. Es la misma dirección que hace dos años se posicionaba en contra de que cada militante tuviera un voto en la elección del Secretario General, tal y como demuestra el programa de Nino Torres para optar a su cargo actual.

Del voto de delegados a “un militante, un voto”

La ejecutiva de las Juventudes Socialistas de España se renovó en abril de 2012 con la apabullante victoria del asturiano Nino Torre. Su principal rival en el proceso electoral fue Noelia García, quien con su candidatura, Jóvenes por la Renovación, incluyó en el debate interno la propuesta de un militante, un voto: “El Secretario/a General de las Juventudes Socialistas de España, así como de cada Comisión Ejecutiva Provincial, Comarcal, Insular, Regional, Nacional o Autonómica sea elegido/a por todos y cada uno de los militantes de base de la organización, un militante un voto”.

Esta iniciativa no fue asumida por el candidato Nino Torre, quien no lo incluyó en su programa, y que acabó consiguiendo la victoria con un 89,9% de los votos de los delegados. Noelia García no consiguió reunir el aval mínimo del 20% de los delegados.

Nino Torre justifica la nueva decisión derivada del “clamor popular en la militancia”. “Los tiempos cambian y nosotros debemos adaptarnos a ellos. Hemos tomado esta decisión para el PSOE, y en el momento que se llegue a un proceso similar en las juventudes habrá que ver qué queremos”, ha añadido. Torre destaca, además, la novedad: “Nunca el partido ni las juventudes han apostado por este proceso; ahora sí, pero hay que regularlo y hacer las cosas bien”. Por último, el secretario general apuesta por escuchar a las bases y a la militancia para la renovación del partido.

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