Abortos turísticos en Londres: las Yes Men del derecho a decidir

Después de fotos de gatitos y de porno, lo que más abunda en internet son los bulos. La mayoría de ellos tienen como objetivo extender virus informáticos y captar direcciones de correo electrónico o, en el mejor de los casos, llamar la atención del público y alimentar el ego de su creador. Pero este tipo de mensajes también pueden servir para la denuncia social.

La respuesta ciudadana a la cumbre de la Organización Mundial del Comercio (OMC) celebrada en Seattle en 1999 es uno de los hitos más importantes en la historia de la sociedad civil. Miles de manifestantes antiglobalización (40.000, según las estimaciones -tirando a la baja- de la policía local) se organizaron al margen de cualquier estructura jerárquica tradicional y lograron poner en jaque la seguridad del grupo de hombres más poderosos del
planeta.

Entre quienes crearon cadenas humanas que impedían el paso de la policía en las calles de Seattle no se encontraban The Yes Men. Frustrados por no poder acudir a la contracumbre, este grupo de activistas creó un fake (web falsa) de la OMC que imitaba las formas y contenidos de esta corporación, pero exagerando ligeramente su discurso. Pronto, empezaron a llegarles invitaciones para participar como representantes del organismo en los más variados y altos foros. Objetivo cumplido.

Anuncio de New Life aparecido en el metro de Barcelona.

Un anuncio aparecido la semana pasada en el metro de Barcelona, una cuenta en Twitter y una web han hecho dudar, al menos durante unas horas, incluso a los más avezados cazadores de hoax (bulos difundidos por internet). El colectivo New Life, que prefiere mantenerse en el anonimato, presentaba la semana pasada una agencia de viajes especializada en paquetes turísticos para abortar en Londres. ¿Pura ficción o anticipación de lo que espera a las mujeres españolas en un futuro inmediato?

De aprobarse la reforma de la Ley del aborto propuesta por el ministro de Justicia, Alberto Ruiz-Gallardón, «no nos cabe ninguna duda de que lo que presentamos en nuestros vídeos será una realidad», afirman desde este grupo de activistas en conversación por email. «De hecho, la nuestra es una versión amable de lo que sufrirán muchas mujeres, la realidad que nos quiere imponer el PP es mucho más terrorífica.»

En un vídeo publicado el pasado miércoles, la supuesta agencia ofrecía el llamado «Happy Tour«, compuesto por la intervención para interrumpir un embarazo no deseado en más de 100 clínicas de Londres, la reserva del vuelo y el hotel, recogida en el aeropuerto e, incluso, servicio de personal shopping. Todo, por el precio de 8.000 euros, pensión completa incluida.

El dominio de la web, registrado a nombre de la histórica feminista y anarquista Emma Goldman, y el manifiesto
hecho público el jueves, en el que exigen que «el aborto sea libre y gratuito para todas», desvelaron el misterio. También contribuyó a evidenciar la intención de denuncia la publicación de un segundo vídeo en el que New Life presenta sus packs económicos para abortar, entre los que se incluyen la ingesta de infusión de ruda, la introducción vía vaginal de sales de plomo, mercurio y aluminio o el rascado del útero con una percha de metal.

«Hemos recibido todo tipo de reacciones», explica el colectivo.»Desde gente diciendo lo mucho que les ha gustado el primer video de la campaña a antiabortistas que no han cazado la ironía y nos llaman asesinos. También hemos tenido bastantes mails de gente preguntando por nuestros servicios, pero en muchos casos es difícil saber cuáles son consultas reales y cuáles gente intentando destapar el fake.»

El objetivo de esta campaña es señalar «que la reforma de la ley del aborto no sólo es un atentado contra los derechos de todas las mujeres sino que además es clasista y creará una desigualdad social que puede llegar a ser
mortal para las mujeres con menos recursos».