España permite al fin que el avión de Evo Morales sobrevuele la Península

Tras pasar la noche en el aeropuerto de Viena, la capital austriaca, ante la negativa de varios países europeos a permitir que su avión sobrevolara su espacio aéreo, el presidente de Bolivia, Evo Morales, viaja ya rumbo a su país después de que España aceptara al fin abrir sus cielos al avión presidencial. Morales se dirigía a La Paz desde Moscú cuando tuvo que aterrizar en el aeropuerto austriaco tras serle cerrado el paso por España, Portugal, Francia e Italia.

El motivo fue que estos países se negaron esta madrugada a que el avión del presidente hiciese escala en sus aeropuertos al tener “sospechas” de que el exagente de inteligencia de Estados Unidos Edward Snowden pudiera ir a bordo del aparato. Snowden está en busca y captura por el Gobierno de Barack Obama al revelar que la Agencia de Seguridad Nacional de Estados Unidos (NSA) posee un programa llamado PRISM con el que accede a los servidores de nueve empresas de Internet, con su consentimiento, para espiar a sus usuarios.

Desde entonces, Snowden ha estado en China y en Rusia a la espera de conseguir la extradición «segura» a un tercer país, presumiblemente de Latinoamérica. Los nombres de Cuba, Venezuela, Bolivia y Ecuador son algunos de los que se han mencionado como posibles destinos del exespía.

Fuentes del Ministerio español de Exteriores informaron de que hoy, a las 9.30 de la mañana, se autorizó finalmente a que el avión de Morales sobrevolara territorio español e hiciera una escala técnica para repostar en Las Palmas de Gran Canaria. El Gobierno sostiene que el Ejecutivo dio luz verde a este permiso ayer pero que el avión aterrizó «de forma imprevista» en Viena, informó la agencia Efe.

La versión del propio presidente boliviano es muy diferente. Según su relato, el embajador español en Viena, Alberto Carnero, acudió al aeropuerto con la intención de entrar en el avión. «Me pidió que tomáramos un café dentro del avión para controlarlo», explicó Evo Morales. El jefe de Estado boliviano se negó y apostilló que él «no es un delincuente» como para que le registren el avión.

En total, el presidente boliviano ha pasado 12 horas retenido en el aeropuerto; una situación que ha escandalizado a su Gobierno:  «Queremos decir al mundo que el presidente Morales ha sido secuestrado por el imperialismo y está retenido en Europa», explicó en una rueda de prensa el vicepresidente García Linera.

Además, denunció que funcionarios europeos -uno de ellos  español, según la Agencia Boliviana de Información (ABI)- intentaron «chantajear» a Morales al ofrecerle que sobrevolara su espacio aéreo a cambio de pudieran revisar su avión.

El ministro de Exteriores boliviano, David Choquehuanca, negó rotundamente que el exespía fuera en el avión de Morales. «No sabemos quién se ha inventado esta soberana mentira. Nosotros no podemos mentir a la comunidad internacional y llevar pasajeros fantasma», concluyó.

La ambigüedad de España

A lo largo de la madrugada y en las primeras horas de la mañana, Francia y Portugal dieron marcha atrás y autorizaron, finalmente, que el avión de Morales atravesara su espacio aéreo para regresar a Bolivia, aunque Italia mantuvo su posición inicial, según ha informado el ministro de Defensa, Rubén Saavedra, en declaraciones recogidas por Bolivia TV.

Respecto a España, siempre según el Gobierno boliviano, el Gobierno dio inicialmente su visto bueno para que el avión de Morales repostara en las Islas Canarias, luego, según el embajador español en Viena, Alberto Carnero,  el Gobierno de Mariano Rajoy le informó de que esta autorización no se había producido aún. Finalmente, a las 9.30 de hoy se confirmó la luz verde del Gobierno para que el avión presidencial boliviano sobrevolara e hiciera escala en España.