Alto en fuego “permanente” en Gaza tras la muerte de más de 2.130 palestinos

Hamás e Israel han pactado un alto el fuego en la Franja de Gaza tras 50 días de bombardeos por parte del Ejército israelí y ataques de las milicias islamistas. La tregua, que los responsables definen como “permanente”, no establece plazos de finalización y llega tras la muerte de más de 2.130 palestinos y 67 israelíes.

El acuerdo establece el “levantamiento del bloqueo” que sufre el pueblo palestino así como el asedio militar por parte de Israel. Además, amplia la zona de pesca y abre pasos fronterizos para la entrada de material de construcción. Sin embargo, no se harán efectivas la transferencia de fondos a Hamás, la apertura del puerto y aeropuerto o la entrega de prisioneros, algo sobre lo que se negociará más adelante.

El alto el fuego establece además las condiciones para reconstruir la Franja de Gaza, ya que los continuos bombardeos han destruido la canalización de agua y dificultan el acceso a electricidad que se limita a seis horas al día. Asimismo, más de 450.000 personas han abandonado sus casas.

Euforia en las calles de Gaza

La noticia del alto el fuego ha sido recibida con euforia en las calles de Gaza. Miles de personas han salido a la calle a celebrar lo que consideran una victoria de Hamás y la resistencia del pueblo palestino.

“Gracias a Dios la guerra ha terminado, no puedo creer que esté viva”, “Esto es una gran victoria para Hamás”, son algunos de los testimonios recogidos por la agencia de noticias AFP durante las celebraciones.