172 muertos y 1.230 heridos tras una semana de bombardeos sobre Gaza

Los bombardeos israelíes no han dado tregua este domingo, cuando se ha cumplido ya una semana de ofensiva sobre la Franja de Gaza. La artillería israelí ha golpeado tanto objetivos militares de Hamás como viviendas en poblaciones palestinas: 147 hogares han sido destruidos estos días, 172 palestinos han muerto, según fuentes oficiales, decenas de ellos niños, y 1.230 han resultado heridos.

Este fin de semana ha sido también el del éxodo de unos 17.000 palestinos, que han abandonado sus viviendas en el norte de la Franja, tras el aviso de Israel de un bombardeo intenso de la zona. La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos ha preparado ya una decena de refugios.

El Centro por los Derechos Humanos ha informado de que la mayoría de las víctimas de los bombardeos son civiles. Entre los fallecidos, al menos 35 son niños. Además de las casas destruidas, cientos han sido seriamente dañadas.

El sábado llegaron a morir 18 palestinos en un mismo ataque contra una sola vivienda en la ciudad de Gaza. Por otro lado, ni un solo israelí ha sido asesinado desde el comienzo de la ofensiva, aunque Hamás ha lanzado cientos de cohetes sobre el territorio esta semana.

A pesar de que las llamadas para un cese del fuego se incrementan día tras día, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dejó claro que no contemplaban el fin de la ofensiva. “No sabemos cuando terminará esta operación”, ha asegurado.

De hecho, Israel ha lanzado octavillas sobre la Franja en las que avisa que el Ejército va a atacar “a terroristas e infraestructuras en la zona” mediante asaltos terrestres. “La campaña del Ejército israelí será corta y temporal. Aquellos que no hagan caso a las recomendaciones pondrán en peligro sus vidas y las de sus familias”, han advertido los militares.

En Jerusalén Este se han producido disturbios. Cientos de palestinos residentes en la zona han protestado por el ataque contra Gaza. Este domingo, la policía ha arrestado a 36 personas por ser «sospechosas» de provocar desórdenes, lanzar piedras y cócteles molotov en Jerusalén, según informa el diario Haaretz. 165 personas han sido arrestadas esta semana con cargos similares, entre ellas 44 menores.