Economía | Otros
Mercadona pierde su pulso ante el trabajador que despidió por comerse una croqueta
La cadena de supermercados despidió a un trabajador por comerse una croqueta que iba destinada a la basura. "En modo alguno" este hecho puede suponer “la sanción más grave del mundo laboral”, dice el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-la Mancha, que obliga a readmitir al exempleado o indemnizarlo con 40.000 euros.
Mercadona despidió a un trabajador que se comió una croqueta que se iba a tirar a la basura. La empresa consideró aquel acto como una falta «muy grave», según su convenio colectivo, y suficiente para echar al empleado, que llevaba 16 años trabajando en la cadena de supermercados. Los hechos ocurrieron en verano de 2023. Ahora, por segunda vez, y tras un recurso de Mercadona, un tribunal ha declarado improcedente el despido.
«En modo alguno» este hecho puede suponer “la sanción más grave del mundo laboral como es el despido del trabajador”, dice el Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, como ya decidiera el juzgado de primera instancia. De este modo, Mercadona, que aún puede recurrir al Supremo, tendrá que readmitir al trabajador o indemnizarlo con unos 40.000 euros. Según publica El País, la empresa optará por indemnizar al exempleado.
Como recoge la sentencia, el trabajador nunca ocultó que se había comido la croqueta: la cogió del estante donde estaban colocadas las que no se habían vendido y se iban a tirar a la basura –algo que en efecto prohíbe Mercadona– y se la comió. Al verlo, según recogen algunos medios, una compañera informó de los hechos a la coordinadora, a la que el empleado confirmó los hechos. Eso ocurrió un sábado noche, y el lunes recibió el despido.
No obstante, la empresa, como publica El País, acusó al empleado de haberse comido un blíster entero de croquetas, cuyo precio era de 4,20 euros. Mercadona hablaba de “fraude, deslealtad o abuso de confianza”, de “robo, hurto o malversación” a la empresa. Hablaba de “apropiación indebida de productos”. Y justificaba también el despido disciplinario basándose en el artículo 54.2 d) del Estatuto de los Trabajadores, que menciona “la transgresión de la buena fe contractual, así como el abuso de confianza en el desempeño del trabajo”.
Nada de eso se da en este caso, según el TSJ: una croqueta que se va a tirar a la basura “no tiene ningún valor de mercado, ni siquiera ínfimo, pues la misma, destinada a la basura, no podía ser puesta en venta al público”. Además, el tribunal incide, para desterrar la idea de “apropiación indebida de productos”, en que se trató de una sola croqueta, en singular. Lo máximo que podía haber hecho Mercadona, según la justicia, era sancionarlo, de acuerdo a su convenio colectivo. Pero nunca despedirlo.
1000 millones de beneficios record (+40%) vendiendo alimentos, el año que mas se encarecieron los precios desde decadas. pero el sistema está así montado:
a mas crisis mas beneficios, todo muy etico y moral y tambien muy catolico. luego una donacion por la Dana, otra para caritas y a un empleado de 16 años de antigúedad una caritativa indenización si es que no vuelve a apelar al supremo mientras el emplerado espera unos añitos a otra sentencia. o quizas si se arrodilla pide perdon y le besa los pies al rey supremo lo readmitan por caridad cristiana.
Esta gentuza cuánto más roban y explotan mas rezan y dan limosnas a su dios que si existiera sería el gerente de esta pandilla de mangantes que solo traen guerras y miserias. Ya es hora de denunciar a estos benefactores de la miseria.
Actualmente son muchos, muchísimos lxs trabajadores de derechas. Los que no lo esconden dicen que gracias a los «ricos» que crean puestos de trabajo, que sería sin ellos. A la gente de izquierdas nos ven como los desestabilizadores, como enemigos de lo que ellos consideran el progreso.
Esta gente no ha conocido otra cosa que el sistema capitalista, no sabe que hay «otros mundos», otras formas de vida más humanas y sensatas.
Confiemos en que no haya muchas de esta clase de compañeras que se chivan al patrón.
Esperaría alguna recompensa?
Compañeros criados hay que son peores que el amo.
Mercadona no tiene autoridad moral alguna para hablar de deslealtad, robo, ect. puesto que Joan Roig es miembro del Opus Dei y esta secta es máster en esas materias.