Opinión

Progresar no es avanzar

"Que alguien sometido al ordenamiento jurídico no pueda ser juzgado por sus actos, que no se le puedan atribuir, por principio, responsabilidades civiles o penales derivadas de conductas lesivas, es un delirio absolutista que nada tiene que ver con la Constitución del 78 ni con el ámbito de convivencia que propugna", escribe Fernando Royuela.

Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.