Internacional

El comunismo bate récords capitalistas

"En una sola y frenética jornada comercial en China se movió tanto dinero como Producto Interior Bruto tiene Letonia al año", analiza la periodista.

Varias trabajadoras clasifican paquetes en un centro logístico de correos en China. REUTERS

Mónica G. Prieto

13 noviembre 2019 Una lectura de 3 minutos

Podría resultar irónico que el país que bate todas las marcas capitalistas sea, precisamente, la dictadura comunista china. La última edición del Día del Soltero, la festividad local que pretende consolar con descuentos a quienes no han encontrado pareja –demasiado ocupados por estudiar, trabajar y prosperar económicamente– alcanzó ayer nuevos récords: la cifra total de ventas solo en Alibaba –el gigante del comercio electrónico chino, que ya llega a todo el mundo mediante su rama extranjera Aliexpress– superó los 34.600 millones de euros, un 25% de incremento respecto a los resultados obtenidos el año pasado. Casi 35.000 millones de euros se movieron en el día de los cuatro unos: es decir, en una sola y frenética jornada comercial en China se movió tanto dinero como Producto Interior Bruto tiene Letonia al año, lo cual debería generar al menos cierta reflexión teniendo en cuenta que, según los datos del Fondo Monetario Internacional, Letonia ocupa el puesto 99 en la lista de 194 países que cataloga la institución según su producción anual.

El apetito voraz por el consumismo explica muchas cosas en China, pero por encima de todo explica el éxito del régimen de Xi Jinping –normalizado y blanqueado por Occidente, a quien ya no molestan las dictaduras ni violaciones de Derechos Humanos siempre que lleguen con chequera– y la estabilidad de una dictadura que ya no es contestada desde dentro. En los últimos 40 años de desarrollo, 800 millones de chinos han salido de la pobreza. Si entonces un 88% de la población vivía con dos dólares al día, ahora solo lo hace un 6% del pueblo chino. La esperanza de vida se ha disparado y también la renta per capita: hace una década la población vivía de media con 3.000 euros al año y ahora dispone de 10.500 euros anuales. Pero ese desarrollo económico ha ido acompañado de un draconiano control de la población que se sirve de la tecnología para vigilar y garantizar que no haya ninguna disidencia dispuesta a cuestionar el estricto régimen chino.

Ahora que China ha alcanzado la prosperidad económica tras décadas de hambrunas y penurias, una buena parte de la población solo quiere mantenerla al precio que sea, y está muy dispuesta a renunciar a sus derechos por mantener su recién adquirida calidad de vida. No le molesta que el gran hermano vigile cada uno de sus movimientos siempre que los salarios y el consumo esté asegurado. No le molesta los cientos de campos de reeducación, ni la represión de comunidades enteras como la tibetana o la uigur, ni los activistas arrestados sin garantías. La capacidad de gastar parece compensar la ausencia de libertades básicas.

Y el modelo se extiende a otras dictaduras comunistas como Vietnam o Corea del Norte, donde la dictadura de los Kim intenta replicar el éxito de sus vecinos para garantizarse el apoyo de una población sometida y aislada del mundo. El señuelo del consumo combinado con un control extremo funciona a gran escala, como demuestra Pekín. Lo preocupante es que sea normalizado por países y por sociedades democráticas, a quienes ya no rechina la forma de hacer las cosas de China

Gracias a la colaboración de miles de personas como tú, publicamos lamarea.com. Ayúdanos a seguir haciéndolo

¿Sabes lo que cuesta este artículo?

Publicar esta pieza ha requerido la participación de varias personas. Un artículo es siempre un trabajo de equipo en el que participan periodistas, responsables de edición de texto e imágenes, programación, redes sociales… Según la complejidad del tema, sobre todo si es un reportaje de investigación, el coste será más o menos elevado. La principal fuente de financiación de lamarea.com son las suscripciones. Si crees en el periodismo independiente, colabora.

Comentarios

Carmen C. dice:

18/11/2019 a las 16:53

ESTIMADO DAVID: SOCIALISMO O BARBARIE.
Creía que los lectores de La Marea tenían ésto claro.
Nos suele pasar a todxs que vemos la paja en el ojo ajeno y no vemos la viga en el nuestro.
No creo que ningún país en el mundo sea verdaderamente comunista pues sólo los seres altruistas están preparados para serlo (lo mismo digo del anarquismo bien entendido).
El rebaño humano, salvo minorías, no entendemos de otra cosa que no sea acumular, pocxs piensan y se preocupan en el bienestar de su prójimo y ésto va a más desde que la dictadura global capitalista, la más genocida y alienante de todas las dictaduras, ha conseguido robarle el alma, la conciencia, los valores al ser humano además de envenenar y hacer inhabitable atmosférica y humanamente nuestra Casa Común, el Planeta Tierra.
No me extiendo más pues creo que sabes de sobra todo ésto y más.
Aunque hoy día el genuino socialismo, comunismo y anarquismo sean una utopía que no alcanzaremos a ver, habrá que empujarlos, como cantaba Labordeta, hombre de valores, para que un día puedan ser.
«Ninguna organización terrorista ha matado tanto como la OTAN»: Sánchez Gordillo
https://www.youtube.com/watch?v=0WulgkgI7LU

Responder
Aitor dice:

15/11/2019 a las 10:47

China comunista? ?????

Responder
David dice:

14/11/2019 a las 17:33

Entonces Carmen… ¿China no es una dictadura? Creo que Mónica ha hecho un artículo resaltando datos objetivos, reales. Al final cualquier dictadura roba la libertad, da igual del color que sea, por eso terminan pareciéndose. Lo que llamas tú dictadura del capital es algo que esclaviza a mucha gente pero que se puede esquivar y de hecho hay mucha gente que lo hace. También es un diseño abierto, basado en reglas que van evolucionando, y que se pueden aprovechar para conseguir tus objetivos; no hablo de consumir. Sin embargo, no parece que las dictaduras que defiendes dejen opción a la gente que las sufre.

Responder
Carmen C. dice:

14/11/2019 a las 17:09

Para tí Mónica todo lo comunista es dictadura, parece ser que la más letal de todas las dictaduras, la del capital, para tí es democracia.
Cuando leo tus artículos me parece estar leyendo prensa de derechas.
La dictadura del capital se sabe vender por democracia y la gente se lo ha creído. De sobras se lo han creído; cuando por culpa de esta dictadura hemos llevado al Planeta al límite de la agonía, cuando seguimos masacrando y robando los recursos de otros pueblos, obligando a sus gentes a emigrar y sus verdugos les ponen muros, cuando el ser humano avanzamos hacia los límites de la precariedad (Oxfam: 26 millonarios poseen la riqueza de 3.800 millones de pobres), de la pérdida de derechos y de las libertades más elementales, creo que lo más inoportuno en estos momentos es insistir en las dictaduras comunistas y seguir teniendo engañada a la gente de que la dictadura más genocida, la del capital, es una democracia.
Y sobre todo en España, dónde los comunistas, anarquistas, socialistas que defendieron frente a la oligarquía los derechos y las libertades del pueblo siguen enterrados en las cunetas.
Por otro lado China ya sólo tiene de comunista el nombre. Lo mismo que Rusia, la antigua URSS, hace años que forman parte de la dictadura de los mercados. La gente tiene mono de consumo, porque es lo que les martillea incesantemente la propaganda capitalista que ha arrasado con los valores humanos, y es necesario de que vea las dramáticas consecuencias de ese consumo innecesario e irresponsable tanto para el Planeta como para sus semejantes.
Luther King, Gandhi, eran comunistas:
El mundo tiene suficientes recursos para satisfacer las necesidades de todxs, pero no la codicia de cada unx (Gandhi)

Responder
Juan dice:

14/11/2019 a las 07:57

Breve reflexión de 2 minutos sobre etiquetar de loser o winner:
https://www.youtube.com/watch?v=f0reHoKRvBI
Espero que sirva de algo.

Responder

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.