Política

“Como mujer, de izquierdas y feminista, me sentí profundamente huérfana cuando tuve a mi hijo”

En 'Mamá desobediente' (Capitán Swing), Esther Vivas aborda la maternidad desde un punto de vista feminista en el que introduce también el factor determinante de clase: "Ser madre se está convirtiendo en un privilegio".

Comentarios
  1. La autora se contradice a sí misma.

    Es absurdo sufrir por no poder traer un hijo a este mundo (que es injusto y no sabes cómo le va a afectar). No sabes cómo será contigo ni con el mundo por muy bien que lo eduques ni por muy positiva que seas. Miles de madres hubieran preferido quedar estériles si hubieran sabido que traerían hijos gravemente enfermos o que cometerían graves delitos. Sufrir por no poder ser madre biológica es sinónimo de idealizar la maternidad y pensar que ser madre es indispensable para poder ser feliz o realizarse como mujer por el mero hecho de desearlo. No se puede romper la idealización sobre la maternidad si no llamamos las cosas por su nombre. Es absurdo sufrir por ello como también lo es sufrir por no tener pareja, hermanos o no haber podido acceder a una carrera determinada. Por ello, es contraproducente no decirlo alto y claro. No es lo mismo no poder ser madre biológica e intentarlo sin pensar que es una desgracia ser estéril que pensar que sí. Y para que esto llegue a ser hay que enterrar la idea de que no poder ser madre biológica es algo grave.

    Fomentar la natalidad no solo no es esencial sino contraproducente en un mundo superpoblado en constante crisis social, económica y medioambiental. Se debe apoyar la maternidad en sí por el bien de los hijos, de las madres y de la sociedad en general. Y se debe fomentar la responsabilidad reproductiva (solo tener hijos si se tiene estabilidad económica y emocional) y la adopción no solo para parejas estériles.

  2. 38 AÑOS DE CÁRCEL Y 148 LATIGAZOS PARA DESTACADA ABOGADA IRANÍ.
    Nasrin Sotoudeh ha sido condenada por defender los derechos de las mujeres en Irán

    Luchar pacíficamente por los derechos humanos. Eso es lo que ha hecho Nasrin toda su vida. Como abogada defendía a las mujeres que se negaban a acatar las degradantes leyes sobre el uso del velo o hijab.
    https://www.es.amnesty.org/actua/acciones/iran-nasrin-sotoudeh-mar19/?utm_source=email&utm_medium=email&utm_campaign=mailsoc&utm_content=nasrin

    En Irán, a las mujeres y a las niñas no se les permite salir de sus hogares a menos que se cubran el cabello con un pañuelo y los brazos y las piernas con ropa suelta. Nasrin quería cambiar esto y fue detenida por ello.
    Las autoridades iraníes interpretan que eso atenta contra la seguridad nacional o es un insulto al “Líder Supremo”.

    Y le han impuesto la pena más cruel. La de Nasrin es la sentencia más dura que se recuerde en muchos años contra un defensor o defensora de los derechos humanos .

    No podemos permitir que esta gran mujer reciba un solo latigazo ni pase un día más en prisión.

    Exige al Líder Supremo de Irán la liberación inmediata e incondicional de Nasrin Sotoudeh y que la sentencia sea anulada ya

  3. El sadismo de la derecha: fomentar la natalidad para condenar a estas criaturas a la precariedad, a la enfermedad, a la incultura; para abusar de ellas.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.