A través del prisma del que ha tenido que abandonar forzosamente su casa. Desde la perspectiva de la que ha tenido que dejar a su familia a miles de kilómetros. Con la mirada de la persona que ha atravesado numerosos países para estar a salvo. Desde el punto de vista del que ha tenido que dejar de informar por amenazas o intento de asesinato. Partiendo de este cambio de foco nace Refugees.tv, en Austria, el primer canal europeo cuyo personal está compuesto por refugiados. El equipo en estos momentos lo forman diez personas, seis de ellas exiliadas.
David y Martin, dos cineastas austriacos de 37 y 35 años son los impulsores de esta iniciativa. Les acompañan Sigrid y Daniel. A finales de julio del pasado año, Salzburgo empezó a ser un punto de estancia y tránsito de miles de refugiados. Cuando se instaló el primer campo, los dos austriacos se acercaron motivados por la necesidad de ayudar de alguna forma. Comenzaron con actividades para los niños, luego impartieron pequeños talleres sobre cómo utilizar cámaras, hasta que se percataron de la presencia de numerosos profesionales de la comunicación. No dudaron en plantearse crear un proyecto donde el protagonista fuera la perspectiva que estos cámaras y periodistas podían ofrecer sobre la actual situación. Éste es su capital más valioso, The other perspective.
Los promotores de este proyecto aseguran que siempre han querido trabajar con profesionales de otros países, por eso no ven su iniciativa como una acción caritativa. “Los políticos hablan de integración, nosotros vamos más allá y trabajamos directamente con ellos, somos un equipo”, comenta David, que insiste en que han creado la televisión más internacional posible. El equipo está formado por profesionales de Somalia, Iraq, Nigeria, Afganistán, Alemania y Austria.
Periodistas exiliados
Olivia, Ayad, Said, Fathi, Arman y Newton forman el equipo. Olivia, que tiene 16 años y el sueño de ser periodista, tuvo que dejar su país, Nigeria, después de que su padre muriera. Ahora, en Viena desde hace algo más de año y medio, compagina sus estudios con este proyecto. Es la única integrante del equipo que no ha tenido que huir de su país por hacer periodismo.
Newton es uno de los cámaras. Tiene 29 años y fue arrestado tras grabar las corruptelas del partido del gobierno con las autoridades electorales durante las últimas elecciones generales de Nigeria. Consiguieron liberarlo por la fuerza a través del partido para el que había hecho el video e inmediatamente le compraron unos billetes de avión hacia Europa. El gobierno puso un anuncio en el periódico y lo incluyeron en una «lista de la muerte». “El trabajo que más amaba en mi vida me había puesto en serios problemas”, lamenta. Newton, que viene de una familia rica, jamás imaginó que terminaría en Europa por obligación. Atrás dejó a su familia y una empresa de vídeo con ocho trabajadores a su cargo. David le visitó en el centro para refugiados en el que vive a la espera de que le acepten el asilo. Formar parte de este proyecto le ha servido para estar más contento. «Estoy haciendo lo que amo en mi vida” añade.
Otro de los miembros forzados al exilio es Ayad. Este iraquí ha trabajado como reportero en televisiones como Qatar TV, ALEKHBARYA de Arabia Saudi y Fox News. “Soy periodista y contaba la situación real en la que estaba el país. Hay mucha corrupción, bombas, asesinatos y secuestros”, narra. Por hacer periodismo sufrió numerosos atentados. Un amigo suyo le comentó que su nombre aparecía en una lista de objetivos, así que decidió dejar su país y, tras vivir en un centro para refugiados durante casi un año, ha conseguido el asilo.
El primer reportaje que grabó Refugee.tv fue en octubre del año pasado, en un campo de refugiados en la frontera con Alemania. Desde entonces han elaborado tres más. En uno de ellos salieron a la calle a preguntar «¿Tienes miedo a los refugiados?» y comprobaron de primera mano cómo no todos los ven con buenos ojos.
Para poder llevar a cabo este proyecto, los impulsores pusieron en marcha una campaña de micromecenazgo. Tras la emisión la semana pasada de un reportaje sobre ellos en la cadena ORF, la más importante de Austria, doblaron las aportaciones económicas. El objetivo era lograr 5.000 euros y, a falta de una semana para cerrarse, la cifra es de 6.800 euros. Además, con la difusión se ha corrido la voz y David ha recibido más de 20 llamadas y mensajes desde Austria, Alemania y Suiza de asilados interesados en participar en el proyecto. “Sería un sueño crear una red de colaboraciones con los periodistas refugiados en diferentes ciudades y países”, concluye Daniel.
