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La candidatura unitaria en Barcelona inicia su recorrido a partir del Código Ético

Guanyem, ICV-EUiA, la CUP, Procés Constituent, Podem Barcelona, Partido X y ciudadanos a título individual comienzan este viernes el proceso de confluencia de cara a las elecciones municipales

Brais Benítez

10 octubre 2014 Una lectura de 5 minutos

BARCELONA // Un primer paso, aunque de gran relevancia, para calibrar las posibilidades de confluencia de partidos de izquierda y movimientos sociales en una candidatura unitaria a las elecciones municipales de Barcelona. Así encaran las diversas organizaciones participantes las jornadas Gobernar obedeciendo. Jornadas de Código Ético para la confluencia en Barcelona que se desarrollarán entre la tarde del viernes y la mañana del sábado en el Centro Cívico La Sedeta de la capital catalana. Las jornadas han sido organizadas por Guanyem, ICV-EUiA, el Encuentro Popular Municipalista (TPM en sus siglas en catalán) -que representa a la CUP-, Podem Barcelona, Procés Constituent y el Partido X, aunque también contará con la participación de ciudadanos a título individual. La expectativa es grande: hace dos días que se cerraron las inscripciones -más de 500 personas se han apuntado- después de que se completase el aforo.

El encuentro servirá para detectar puntos de encuentro que permitan unir fuerzas a partir de la discusión del código ético que deberá regir la «nueva política» que desarrollaría la candidatura. El documento base que se llevará a debate ha sido elaborado a partir de las propuestas de las diversas organizaciones, e incluye medidas de fiscalización y control democrático, aspectos sobre financiación y elaboración de las listas, así como cuestiones de transparencia y rendición de cuentas.

«Todos han aportado bastante generosidad para llegar con un documento más o menos acordado, consensuado», explica Gerardo Pisarello, portavoz de Guanyem. «La idea no es salir mañana con un código ético definido, sino detectar cuáles son las exigencias ciudadanas, identificar los problemas, acuerdos y desacuerdos», expone. En base a ello, las distintas organizaciones seguirán trabajando para definir un Código Ético común que se espera que esté acabado en noviembre. «Cada fuerza será soberana entonces para decidir si lo asume o no. Puede ser que todos se sientan cómodos o que alguno no, y decida no asumirlo, que esperemos que no ocurra», apunta Pisarello.

No será una tarea fácil. El objetivo que se plantea Guanyem Barcelona, como su propio nombre indica, es construir una candidatura capaz de llegar a la alcaldía. Para ello, se proponen unir actores políticos y sociales distintos con sus propias dinámicas. Algunos llevan años en las instituciones (ICV-EUiA), otros proceden de los movimientos sociales (Procés Constituent, Partido X y la TPM), y deberá integrar también a aquellos ciudadanos que se sumen al proyecto. Fuentes cercanas al proceso apuntan algunas discrepancias entre organizaciones sobre cuestiones acerca de la limitación de mandatos, el límite de los sueldos (que se apunta sobre los 2.600 euros netos), o el hecho de que un concejal pueda, una vez terminada su labor, recolocarse en otras áreas de gestión.

Estas y otras cuestiones deberán limarse en las jornadas. “Es un primer paso para explorar las posibilidades de articular una candidatura”, apunta David Cid, coordinador de ICV Barcelona. “Por primera vez se plantea un espacio de encuentro y debate entre todos, y esto es positivo”, señala. Iniciativa es la organización que en estos momentos tiene más peso en la política municipal de la ciudad -ICV-EUiA dispone de 5 concejales-, y la que en consecuencia debería a priori hacer más renuncias al confluir en una candidatura unitaria. “No entendemos la confluencia como un espacio de renuncia, sino de coordinación, donde todo el mundo tiene cosas a aportar”, afirma Cid, quien admite que la construcción de una nueva candidatura “es evidente que nos cambiará a todos”.

“Esperemos que sea un espacio de diálogo ciudadano, no sólo de los espacios de referencia que convocamos. Esperamos poder encontrar puntos en común y ponernos de acuerdo para sacar adelante una candidatura”, expone Toni Salado, responsable de relaciones políticas y programa de EUiA. Señala que, desde 2012, la formación detectó la necesidad de articular “un espacio de la izquierda transformadora que vaya más allá”. “En este momento de crisis y de emergencia social, en el que apostamos por una ruptura democrática y por procesos constituyentes, es necesario agrupar a más fuerzas, también los movimientos sociales. Estamos implicados al máximo”, afirma Salado.

La participación de Iniciativa es uno de los puntos que más recelo ha generado en organizaciones como la TPM –impulsada por la CUP–, que ya es un espacio de confluencia en sí mismo en el que también participan personas ajenas a la formación de la izquierda independentista. La II TPM realizada en julio de este año acordó que una candidatura rupturista no puede estar formada por nadie que haya sido responsable de la Marca Barcelona. Para algunos de los asistentes, esto descartaría a ICV, pero para otros este punto se circunscribiría a personas concretas y no a la organización en sí, que podría entrar siempre que hiciese autocrítica sobre su papel en el gobierno municipal. “Existen varias sensibilidades al respecto”, apunta Pepe Castelltort, uno de los portavoces de la TPM.

Castelltort señala que la elaboración del código ético “es sólo una parte de la candidatura”. “Temas importantes como el programa, la metodología, cómo se articula el poder de participación, de decisión”, son también fundamentales para decidir si los dos proyectos se acaban encontrando, subraya. “Hay demasiados factores como para decidir la confluencia desde el código ético”, afirma Castelltort, que espera que se produzca “un debate enriquecedor”. El próximo encuentro de la TPM, que se celebrará durante la segunda mitad del mes de noviembre, acabará de definir las posibilidades de confluencia.

Limitación de sueldos y mandatos y participación ciudadana

El documento base sobre el código ético que se llevará a debate destaca la importancia de la rotación de cargos, la renovación «de caras e ideas» y la conveniencia de «descansar de la función institucional». Para ello se propone una limitación de mandato de ocho años para concejales y cargos de libre designación, ampliables a 12 en «casos excepcionales» tras un referéndum abierto a simpatizantes. También propone estudiar si una vez agotado este tiempo se puede aprovechar su experiencia en otros espacios. Unas medidas que cuentan con la reticencia de algunas de las organizaciones participantes, que consideran los plazos demasiado extensos, y que seguramente serán uno de los puntos calientes del debate.

También se propone que los cargos electos hagan público su patrimonio anual, así como sus agendas, «para hacer visible con quién se reúnen y para protegerlos ante las presiones de los lobbies». Se discutirán fórmulas para evitar el absentismo, a través de sanciones económicas internas, y la limitación «drástica» del gasto en las campañas electorales, la «renuncia a créditos bancarios y donaciones particulares que puedan coartar la independencia», y la transparencia sobre los ingresos de las organizaciones.

Otro de los puntos destacados del documento es el que hace referencia a los mecanismos de rendición de cuentas ante los ciudadanos, para lo cual se propone establecer «espacios reales de participación» de la ciudadanía en asuntos públicos –»sin la necesidad de mantener un estado permanente de movilización»-, para que esta pueda censurar y, en su caso, revocar, a concejales y cargos «por mala gestión o incumplimiento flagrante y no justificado del programa»; así como participar en la toma de decisiones relevantes sobre grandes proyectos urbanísticos y de infraestructuras.

Para dar voz a todas aquellas personas que no puedan asistir a las jornadas, se habilitará una herramienta de participación en línea a través de la cual poder hacer aportaciones y reflexiones. El código ético que se defina en las jornadas será sometido a «validación ciudadana» en noviembre. Las jornadas se podrán seguir vía streaming en la página web habilitada para la ocasión.

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Limitación de sueldos y mandatos y participación ciudadana

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