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Las cuentas de la Conferencia Episcopal se asemejan a las del ‘Gran Capitán’

"La Iglesia católica oficial, 'pecando de soberbia', elabora unos discursos de propaganda política basada en unos supuestos números plagados de imprecisiones y falsedades"

Comentarios
  1. Los números no es lo mio y menos cuando ya se trata de abultadas cifras inimaginables comparadas con mi economía. He querido decir que son quince millones de euros los que regalamos a la iglesia y no quince mil millones como he dejado escrito.
    Pero vamos, ni un euro. Que se lo ganen como tod@s, pero honestamente, no adoctrinando a la sociedad hacia donde a ellos les conviene y aconsejando, en tiempo de elecciones, a que partidos deben votar.

  2. Reconozco que no voy a ir a las fuentes para ver si tiene razón César o Francisco en cuanto a las cifras.
    En todo caso, apoyo la campaña de Laicismo.orga para no marcar ninguna de las casillas en la declaración de la renta:
    http://laicismo.org/detalle.php?pk=30958&tp=ds

    Ni la religión católica ni ninguna otra confesión deberían recibir ni un euro público para fines religiosos.

    La religión, como acto humano sujeto la conciencia individual, debe ser fomentado de forma particular y no pública.

  3. Entre subvenciones directas e indirectas tengo entendido que son quince mil millones de euros los que, como pardillos, regalamos a la iglesia.
    Me pregunto como puede haber mentes tan crédulas, tan ingenuas, que confundan a unos piratas impostores con aquel revolucionario que luchaba contra las injusticias del poder, que no tenía más que lo que llevaba puesto y que decía, pués él ya se olía que alguien haría negocio con él, que «tu templo sea tu corazón, que no es preciso otro templo».
    Cuando parte de la ciudadanía ha protestado ante este despróposito, la iglesia se apresura a replicar con la gran labor que está haciendo Cáritas. A parte de que esa labor es deber del gobierno, no de Cáritas, ésta tambien se apresuró a aclarar que de la iglesia solamente reciben un 2% de las aportaciones.
    EL DINERO DESTINADO A LA IGLESIA DEBE DESTINARSE A LAS NECESIDADES Y DERECHOS DE LA CIUDADANIA.
    ¿Cuando vamos a despertar y a empezar a exigir que se cumpla lo que nos pertenece?

  4. Francisco, tu análisis de la realidad económica de la Iglesia me parece pura propaganda política basada en unos supuestos números plagados de imprecisiones y falsedades, con el ánimo (presunto) de manipular a la opinión pública [sic].

    Lo digo desde la más absoluta parcialidad, puesto que me considero parte de la Iglesia. Pero si yo fuera presidente de un grupo de gente que quiere liberar a Europa de los males de la religión, me estudiaría mejor las cuentas de la Madre del Mal.

    Espera. A lo mejor sí que te las has estudiado. Y por eso las presentas así. Una mentira, a fuerza de repetirla, se convierte en verdad. Eso es lo mismo que piensa Blázquez.

  5. Mienten, pero en nombre de dios. No tomarás el nombre de dios en vano . Eso si lo cumplen, lo toman con grades ganancias y expolio a los ciudadanos. Si dios existiera, la expulsión del templo que narra su biblia, seria cosa de risa comparado con lo que les aria a estos falsos profetas.

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