El Gobierno aprueba un crédito de 877 millones para Defensa

No es justo que se subvencione a la iglesia, ni al cruel espectáculo de los toros (que dice mucho de la «sensibilidad» y «cultura» de los pueblos que lo practican y consienten), ni la fuga de capitales a paraisos fiscales, ni la evasión de impuestos, ni el «choriceo» desde los más altos niveles institucionales, ni la política del «pan para hoy y hambre para mañana» que con la aquiescencia de los ciudadanos se viene practicando desde los tiempos de González y que Aznar la superó notablemente con la ley del suelo y la cultura del ladrillo. No es justo que los gobiernos se pongan a disposición de los tiburones de las finanzas mientras dejan desprotegidas a las capas sociales más débiles, víctimas de la codicia de estos tiburones, no es justo que se recorte la Sanidad Pública, la Escuela Pública, en Investigacíón y Ciencia, ect. ect. ect.
Pero me llama mucho la atención que, salvo pacifistas y antimilitaristas, la sociedad vea lógico subvencionar a una gigantesca «máquina para matar» a los hijos de los pueblos, inocentes ellos de las oscuras tramas, planes y fines en beneficio de los más altos poderes financieros que rigen el mundo mientras descansan a todo lujo y vicio en alguna paradisiaca isla, en algún privado y elitista club o simplemente en su lujosísima mansión.
¿A quien cree la gente que sirven los ejércitos?. ¿no es la mayor estupidez humana subvencionarlos para que maten a nuestros hijos?