Sociedad

La tauromaquia será Bien de Interés Cultural

Los votos del Partido Popular y la abstención del PSOE facilitan la tramitación de la ILP taurina bajo la atenta mirada de sus promotores y representantes del mundo del toreo

Comentarios
  1. t a u r o m a n c i a:

    Culto que derrama el dolor y la sangre de un noble animal,

    ante el altar de un «dios» pagano.

  2. Pues mirusté Mariasno: en EEUU ya estaría todo el Pepe delante de un juez y de doce ciudadanos componiendo un Jurado del Pueblo.

    Pero aquí mientras, para desviar la atención declaramos bién de interés kurturá las corridas sin condón protector de toros.

    ¿Quienes son los grandes filósofos que crearon la kurtura torerista?

    Como siempre he odiado ese espectáculo miserable, cobarde y salvaje, no recuerdo personajes a través de mis ochenta y dos años que aportaran conocimientos sublimes al acervo milenario hispano.

    Solo recuerdo a un tarado homicida conduciendo borracho que cantaba aquello de *Yetamo tan a guttito* y otro que en una de sus *conferencias* deslizó lo de *en do palabra: Im presionante*, coreado con sones de campanario.

    Tererista es igual a marinero de pocas luces toreando sardinas.

  3. No es sólo dinero amigas. Es ideología. Si.

    Como lo es la privatización de la salud (se gasta más), como lo es la Lomce(necesita inversión) con su enseñanza obediente y franquista. Ya pusieron las corridas de toros en tv, ahora, les gustaría enseñar la tauromaquia en el sistema educativo (si, si, lo dicen ellos).

    Están instalando un rancio recuerdo del modus vivendi del nacionalcatolicismo. España, Iglesia y TORTURA de toros.

  4. El PP se acuerda de Lorca para defender a los del paseillo pero no para defender a los que “pasearon”… Que nombren ellos a Lorca es de una inmoralidad repugnante.

    Los terratenientes del sur participaron activamente contra la reforma agraria (meollo de la razón del cuartelazo) que quería sacar adelante la República. Junto con los toreros, muchos de ellos también terratenientes, intervinieron, los primeros días tras el golpe del 18 de julio, en la caza de los jornaleros por la campiña cordobesa, persiguiéndolos a caballo (porque eran los únicos que tenían caballos, claro está).

    Un ejemplo es el rejoneador Antonio Cañero (aún con un barrio a su nombre en la capital califal), que lideró un batallón de voluntarios fascistas, jóvenes caballistas burgueses y capataces, que barrieron los pueblos del curso del Guadalquivir, desde Baena hasta La Carlota.

    Léase «1936: el genocidio franquista en Córdoba» del historiador Fco. Moreno Gómez.

    PD- Después de lo de los correbous… los nacionalistas catalanes mejor que se estén calladitos…

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