MADRID // «El Congreso ha escuchado al pueblo». Así de tajante se ha mostrado Ada Colau, la cara más visible de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), a su salida, sobre las 20:00 horas, por la puerta lateral del Congreso este martes. Faltaban 40 minutos para la votación, pero el Grupo Popular ya había hecho pública su marcha atrás. A pesar de todo lo declarado en los últimos días (la última negativa esta misma mañana), no bloquearía la tramitación de la Iniciativa Legislativa Popular (ILP), avalada por 1.402.854 de firmas.
Y así ha sido. De los 334 diputados presentes, el texto que recoge la regulación de la dación en pago retroactiva, la paralización de los desahucios y el alquiler social, ha obtenido 333 votos a favor. La voz discordante ha sido una abstención en la bancada popular. «Dirán que se han equivocado», ironizaban a las puertas del hemiciclo dos diputados de la oposición.
De esta forma se aprobaba la tramitación de una ILP «producto de 4 años de trabajo», como ha declarado Joan Coscubiela, diputado de Izquierda Plural. “Gracias a la movilización ciudadana hemos demostrado que sí se puede. Lo más importante es que parecía que hoy se iba a bloquear la democracia en este Congreso y se iba a impedir una ILP que cuenta con el apoyo masivo de la población. Finalmente la presión ciudadana ha conseguido que la mayoría absoluta del Partido Popular rectificara», ha declarado Colau.
Lo cierto es que, como ella misma ha reconocido, ha sido una tarde «muy tensa» en el Congreso. Idas y venidas de diputados, gestos desde los sillones de los diputados a la tribuna de invitados (en los que estaban una veintena de activistas de la PAH) y mucho movimiento en los pasillos. A pocos minutos de las 18:00 horas, Ada Colau confirmaba a La Marea que «el PP está reconsiderando su postura”. Con una gran sonrisa preguntaba insistentemente: «¿Cuánta gente hay fuera? ¿Somos muchos?». Se interesaba por la numerosa concentración que desde las 17:00 horas ha tenido lugar a las puertas del Congreso.
Todos los grupos, de una forma u otra, han invitado a lo largo de la tarde a «reflexionar» y «rectificar» al Partido Popular. Con la última de las comparecencias, precisamente la del PP, ha llegado la confirmación. «Señora Colau, el grupo PP y la PAH van por el mismo camino y al final de ese camino están los intereses de los ciudadanos”, ha explicado el portavoz popular en la Comisión de Economía y Competitividad, Teodoro García Egea, frase que ha hecho enfurecer a los activistas.
«¡Expúlsalos, coño!»
«¡Expúlsalos, coño!», chillaba el presidente del Congreso, Jesús María Posada, a los ujieres de la tribuna de invitados. Tras varios rifirrafes entre los activistas y los ujieres, los de la PAH han sido expulsados del hemiciclo por gritar «sí, se puede» y «recordarles que es una victoria de la ciudadanía, no de ningún partido político. Pedimos que no se utilice electoralmente», ha explicado Colau. Y ha añadido, «el PP lo ha presentado como un paseo amable, donde la ciudadanía y mayoría parlamentaria iban de la mano. Eso ha hecho que alguno de nosotros recordásemos lo que hemos hecho durante cuatro años. Sin interrumpir nada, porque era el momento de los aplausos».
La veintena de activistas han sido identificados y uno de ellos, Iván (de la PAH de Cataluña) ha sido retenido. Rosa Lafuente, activista, ha declarado que han recibido «trato abusivo por parte del personal del Congreso, rozando el acoso». Para Lafuente ha sido discriminatorio cómo se les ha tratado pues «nosotros no nos podíamos ni mover. En cambio los taurinos han aplaudido y se han levantado».
A su salida, la activista se ha mostrado muy prudente respecto a los próximos pasos que debe seguir la ILP. «Somos conscientes de que esto es solo una batalla. Ahora queda lo más importante, defender que no haya ningún tipo de reducción y que no se pervierta. Exigimos que las tres medidas de minimos se respeten. Son irrenunciables».
Esta iniciativa, avalada por casi 1,5 millones de firmas, ha llegado hoy al Congreso al mismo tiempo que se conocía que un matrimonio de jubilados de Mallorca se ha suicidado al conocer que iban a ser desahuciados. En un plazo de 48 horas, cuatro personas se han quitado la vida en España acuciados por la certeza de quedarse en la calle.
La decisión de los populares, anunciada a media tarde por el portavoz del grupo parlamentario conservador, Alfonso Alonso, responde a la presión de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), principal promotora de la ILP, así como a la creciente indignación de una opinión pública muy sensibilizada por los dramas humanos, que tantas veces están acabando en muertes, que se esconden tras lo que los bancos llaman de forma aséptica «ejecución hipotecaria».
La casualidad ha querido que, justo hoy, el Congreso tramitara una iniciativa para declarar las corridas de toros bien de interés cultural, lo que ha contribuido a acorralar al PP, que al principio había anunciado un sí sin ambages a los toros y un no, también sin matices, a la iniciativa de la calle para instaurar la dación en pago universal y el alquiler social.
Alfonso Alonso, el portavoz popular, había asegurado por la mañana que su partido no apoyaría la tramitación de la ILP pero que su partido bautizaría el proyecto de ley sobre desahucios impulsado por su grupo con el nombre de la iniciativa popular. Si esta supuesta concesión pretendía calmar los ánimos, ha fracasado estrepitosamente. El anuncio sólo ha servido para indignar a los representantes de la PAH presentes en el Congreso, incluida su portavoz, Ada Colau.
Finalmente, después de que el resto de grupos parlamentarios se haya ido sumando a votar a favor de la ILP, el PP ha tenido que dar su brazo a torcer, lo que abre la vía para la tramitación parlamentaria de esta iniciativa que ha salido de la voluntad de la calle.
«El populismo no solucionará los desahucios»
Sin embargo, en su intervención para exponer la postura de su partido, el diputado popular Teodoro García Egea ha responsabilizado del drama de los desahucios a la «inacción» del anterior gobierno, lo que ha provocado la hilaridad de la bancada socialista y los aplausos de los diputados del PP.
García Egea ha reducido luego la ILP a una iniciativa que ha servido para «trasladar propuestas para el proyecto de ley», considerado por la PAH como favorable a los intereses de los bancos. El diputado popular ha asegurado que el gobierno ha escuchado «la voz de los afectados» y alabado el proyecto impulsado por los populares.
«El objetivo del grupo popular es proteger a los deudores con especial vulnerabilidad» , ha tratado de zanjar, aunque en varios momentos de su intervención ha dejado traslucir que no apoyará la dación en pago universal, como reclama la PAH. «El populismo no solucionará los desahucios», ha concluido.
