BARCELONA // “Este 11 de septiembre será una encrucijada histórica”, declaró hace unos días el conseller de Interior de la Generalitat, Felip Puig. Sus palabras escenifican el ambiente previo a la celebración de la Diada nacional de Catalunya, el próximo martes. Un clima en el que han contribuido dos variables principales: el auge de los partidarios de la independencia en los últimos meses y el énfasis que ha puesto el Govern en llamar a una “movilización masiva”, eso sí, con el foco puesto en el punto fundamental de su hoja de ruta: la consecución del pacto fiscal.
El independentismo está en alza, en buena parte estimulado por la situación de necesidad. A principios de verano, el sondeo realizado por el Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalitat revelaba por primera vez una mayoría partidaria de la independencia de Catalunya: un 51% votaría a favor. Con el principal objetivo de convocar un referéndum sobre la independencia en el 2014, a principios de año se constituyó la Assemblea Nacional Catalana (ANC), integrada por representantes de la sociedad civil y que cuenta con el apoyo de escritores, como Jaume Cabré, cantantes (lluís Llach), actores y diversas personalidades del ámbito social y cultural. Durante el verano, además, varios municipios han aprobado declaraciones de independencia, los últimos Sant Pere de Torelló i Calldetenes (Barcelona).
Además de los actos institucionales, y la tradicional manifestación de los grupos de la izquierda joven independentista, la marcha convocada por la ANC bajo el lema “Catalunya, nuevo estado de Europa”, se prevé multitudinaria. Incluso hay una web que permite asistir “virtualmente” a los catalanes que vivan en el extranjero, y que el sábado por la mañana ya superaba los 10.000 apuntados. A la espera de si la realidad acaba cumpliendo con las expectativas generadas, las diversas formaciones políticas ya han expresado su postura. Algunas comparten el lema e irán a la manifestación. Otras, lo harán pero tras una pancarta propia. También hay quien rechaza de plano cualquier reivindicación independentista.
CiU: El Govern ha dado libertad a sus miembros para acudir a la manifestación. El president, Artur Mas, ha esgrimido el carácter transversal de su cargo para no participar en la marcha, aunque ha declarado que, a título personal, sí que lo haría. Varios miembros de la ejecutiva han confirmado su presencia, como la consellera de Ensenyament, Irene Rigau, o el de Cultura, Ferran Mascarell.
La coalición nacionalista, sin embargo, difiere en su posicionamiento: mientras Convergència se adhiere a la manifestación sin pancarta propia –si bien no formará parte del manifiesto de la ANC-, Unió lo hará solo para reivindicar el pacto fiscal. Su líder, Josep Antoni Duran i Lleida, tras descartar su asistencia a la marcha por compromisos en el congreso, anunció ayer que participará puesto que «ya no es una marcha en pro de la independencia, sino de afirmación catalanista” que “reforzará al Govern y su presidente de cara al pacto fiscal”.
PSC: El líder de los socialistas catalanes, Pere Navarro, ha asegurado que si la manifestación es independentista, el PSC “no se puede sumar porque no estamos de acuerdo”. Varios miembros destacados del partido, como el exconseller Ernest Maragall, han declarado no sentirse cómodos con el lema de la manifestación. Sin embargo, socialistas como la exconsellera de Sanitat, Marina Geli, han confirmado su asistencia.
PPC: Los populares catalanes no asistirán a la marcha, pero sí que participarán en los actos institucionales de la Diada, según anunció ayer su presidenta, Alicia Sánchez Camacho. La dirigente popular ha criticado al Govern que “dedique tanto tiempo a hablar de la manifestación del 11 de septiembre”, y ha subrayado que hacer “proclamas independentistas perjudica la economía catalana”.
ICV: Iniciativa pide a sus simpatizantes que acudan a la manifestación bajo el lema “Por el derecho a decidir ante el Estado y los mercados, no a los recortes de Mas y Rajoy”. Los ecosocialistas suman así el clamor contra los recortes a la reivindicación sobiranista. El secretario general, Joan Herrera, ha expresado que “hay que ir a todas las movilizaciones siempre que se ataca al país”, ya sea por “cuestiones nacionales” o por los “derechos sociales”.
ERC: Esquerra Republicana se ha adherido a la convocatoria de la ANC y marchará por la independencia bajo el lema “Ahora república catalana”. ERC considera que “la mejor solución y vía de salida al expolio es la construcción de la república catalana”. La formación republicana centra sus esfuerzos en la constitución de una hacienda propia que permita recaudar todos los impuestos, y ha instado al president Mas a que siente las bases para ello.
Ciutadans: El partido liderado por Albert Rivera no participará en la manifestación. Rivera ha criticado que la Diada esté dirigida “únicamente a la Cataluña nacionalista, excluyendo a la mayoría de ciudadanos”. Su formación ha afeado a los alcaldes convergentes de Girona (Carles Puigdemont) y Figueres (Santi Vila) que organicen trenes hacia la manifestación en Barcelona.
SI: Solidaritat Catalana per la Independència, que en las pasadas elecciones autonómicas consiguió cuatro diputados (si bien tras la marcha de Joan Laporta se quedó con tres), ha mostrado un apoyo total a la marcha convocada por la ANC y al lema que la presidirá. Su secretario general, Uriel Bertran, ha asegurado que el 11 de setiembre será “un clamor por la independencia”.
La autodenominada izquierda independentista ha convocado una marcha paralela tras el lema “Ni pacto fiscal ni pacto social, independencia y socialismo Países Catalanes”. La protesta la integrarán organizaciones como Endavant (OSAN), el Sindicat d’Estudiants dels Països Catalans (SEPC) o la Candidatura d’Unitat Popular (CUP). La presencia de la CUP, que en las pasadas elecciones municipales logró hacerse con escaños en varios municipios y hasta con cuatro alcaldías, no se ha confirmado hasta esta semana, cuando la formación se ha desmarcado de la convocatoria de la ANC al no encontrar reivindicaciones sociales. Aun así, gran parte de las bases de la CUP sí que participará en la manifestación unitaria.
