Sociedad

La PAH logra establecer un espacio de negociación con Bankia

Tras la ocupación de 12 sucursales la semana pasada, la entidad ha acordado con la Plataforma reunirse periódicamente para dar salida a más de 400 casos

Brais Benítez

08 mayo 2013 Una lectura de 3 minutos

BARCELONA// Después que la semana pasada integrantes de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) ocuparan durante unas horas 12 oficinas de Bankia en Cataluña, un directivo de la entidad se ha reunido este miércoles con representantes de la PAH para negociar una salida a los más de 400 casos de ejecuciones hipotecarias que la entidad tiene en curso en las provincias de Girona y Barcelona. Este primer contacto ha servido para implementar una serie de reuniones periódicas que deben servir para fortalecer la interlocución, hasta ahora casi inexistente.

La Plataforma exige a la entidad que suspenda los desahucios hasta que se llegue a un acuerdo, se tramiten las solicitudes de dación en pago y de alquiler social y se reconozcan las condonaciones de deuda por escrito. Del encuentro no han surgido medidas concretas sobre estas cuestiones, que se esperan abordar en las próximas reuniones.

“Sí que ha sido un paso adelante, la interlocución había funcionado muy mal hasta ahora”, valora la portavoz de la PAH, Ada Colau. Un directivo de la entidad se ha desplazado a Barcelona donde, hasta ahora, la plataforma no había podido entablar diálogo alguno con un representante de Bankia con poder de decisión. “Se han tratado los principales puntos que pedíamos”, explica Colau, aunque de momento sin un compromiso firme por parte de la entidad.

Condonaciones por escrito

La Plataforma exigía que las condonaciones de deuda con la entrega de la vivienda se hiciesen por escrito porque se han dado casos en los cuales, a pesar de existir un acuerdo verbal, el banco ha seguido reclamando la deuda. “Nos han dicho que no dan condonaciones de deuda por escrito por problemas de fiscalidad”, explica Colau. Según la portavoz, el banco alega que al realizar las condonaciones se implementa una fiscalidad elevada que, si no puede pagarla la persona afectada, debe asumir de forma subsidiaria la entidad. “Aunque se comprometen a que en los casos de insolvencia económica no perseguirán la deuda y darán de baja a los afectados de la lista de morosos”, añade la portavoz.

Acerca del alquiler social, que Bankia ha comenzado a impulsar tímidamente en Madrid, el directivo ha mantenido que no se pueden comprometer a aplicarlo en Cataluña de forma generalizada, pero ha asegurado “que estudiaran caso por caso y concederán más alquileres”, cuenta Colau.

La próxima reunión está fechada para el 30 de mayo. Según ha afirmado la portavoz, la PAH no llevará a cabo acciones colectivas de protesta contra Bankia hasta ver como evolucionan los contactos y si realmente se atienden sus peticiones. “Se ha abierto un espacio de negociación que deberemos verificar en los próximos dos o tres meses que efectivamente funcione, pero si hubiese algún caso grave que necesitase una acción no dejaríamos de actuar, la prioridad es siempre la gente afectada”, ha concluido.

Desahucio parado en Sabadell

El otro frente abierto que tenía la PAH hoy en Cataluña era la demanda de la Sareb (comúnmente conocido como ‘banco malo’) para que se desalojasen a once familias desahuciadas que hace un mes ocuparon una finca de 40 viviendas en Sabadell (Barcelona). Este miércoles debían comparecer en los juzgados de la localidad los representantes de la Sareb, pero no se han presentado. La jueza ha denegado finalmente el desalojo y ha instado a la Sareb a dar un uso a las viviendas.

El edificio, propiedad de Caixa Penedès, es de obra nueva y nunca había estado habitado. Es el tercer bloque ocupado por la PAH en Sabadell para alojar a familias desahuciadas, y el octavo de la campaña de ocupación de bloques de la Plataforma. Incluso el gobierno local ha admitido no tener recursos para hacer frente a la “emergencia habitacional que tenemos” y ha instado a la Sareb a negociar con la PAH alquileres sociales para las familias que viven en el bloque.