“Somos un proyecto de futuro”. Cuando el co-portavoz de Equo, Juan López de Uralde, pronunció esta frase en el discurso de apertura del primer Congreso este sábado, los ecologistas se enfrenaban a dos días de intenso trabajo con una larga lista de deberes. Casi dos años después del nacimiento del proyecto, 500 personas entre simpatizantes y socios de Equo se han reunido bajo el lema “Por el planeta y por las personas”, para marcar una hoja de ruta, unos pilares básicos que consoliden al partido en el panorama político y lo alejen de los últimos resultados electorales.
Como los propios dirigentes de Equo reconocieron, el objetivo prioritario en los comicios del 20N era conseguir un escaño por Madrid, cosa que no se cumplió. Después de esta decepción, simpatizantes y socios fijaron la vista y las esperanzas en este primer congreso. Una reunión necesaria para reconstuir sobre la experiencia de las pasadas elecciones, hacer autocrítica, establecer mecanismo internos de organización y gestión, materializar ideas y acabar con las críticas que los definen como utópicos.
Los documentos políticos de organización, la estrategia, la carta constituyente y los Estatutos son los avances logrados en este Congreso, aunque sin duda alguna uno de los aspectos más esperados ha sido la elección de la Comisión Federal. Tras tres días de votaciones y 37 candidaturas individuales el retraso acumulado a lo largo del fin de semana ha emplazado a última hora del domingo el anuncio de los miembros del Comité Federal.
Los ejes sobre los cuales se basa el partido han sido refrendados: ecología política y democracia participativa. Como viene pasando desde hace tiempo, el referente ha sido una vez más Islandia. De hecho, la diputada verde islandesa Gudfridur Lilja Gretarsdottir afirmó el sábado que “hace unos años nadie se podía imaginar que Islandia se levantaría de las cenizas como lo ha hecho”.
Con unas cartulinas amarillas, los asistentes han podido votar resoluciones y enmiendas. A pesar de que los defensores de las enmiendas tan sólo tenían un minuto para realizar su ponencia, el gran número de puntos a tratar (en los Estatutos o en los documentos temáticos, por ejemplo), ha generado algún momento de tensión. Las palabras “plurinacional” o “soberanía” (que finalmente ambas fueron suprimidas del texto) son algunas de las que han sido objeto de debate.
Durante estos dos días muchas caras conocidas se han dejado ver por la reunión verde como muestra de apoyo: Joan Coscubiela (ICV), Enrique Santiago (IU), Cándido Méndez (UGT), Joan Baldoví y Mónica Oltra (Compromís), Cándido Méndez (UGT) y representantes de organizaciones sociales como la FELGTB, CCOO, Plataforma 2015, WWF España, diferentes grupos ecologistas y la Coordinadora de grupos No Gubernamentales.
Los riesgos de un Congreso 2.0
“Estamos locos”, “tanto 2.0 y no está el texto proyectado” o “ahora será que la tierra es plana” son algunos de los comentarios de Mónica Oltra que los seguidores del streaming pudieron escuchar este domingo al votar la eliminación de la palabra “plurinacional” del texto de los Estatutos. Ella era la encargada de presentar las enmiendas por lo que durante la votación estaba cerca del micrófono abierto, aunque no ha sido la única “pillada”.
Los comentarios fueron muy comentados en Twitter ya que, según Equo, la sesión del sábado tuvo casi de 6.000 conexiones con un consumo de más de 150 Gb. Esta técnica, que ha retransmitido en directo los debates y ponencias, ha posibilitado a más de 1.700 afiliados y 12.000 simpatizantes (estos últimos sin derecho a voto) participar en el Congreso sin tener presencia física.
Además, el encuentro verde ha tenido gran presencia en las redes sociales durante este fin de semana, lo que lo demuestran el hashtag nacional #CongresoEquo TT durante toda la mañana y la tarde del sábado, y los acalorados debates simultáneos con @ecopacifistas.
“Equo debería ser más atrevido y más cercano a la política real. Debería contectar más con la base y hacer menos cálculos electorales. Creemos en él pero tiene que ser más valiente”. A dos semanas del Congreso de Equo, Javier Esquembre, el alcalde de Villena (Los Verdes Europeos de Villena) dejaba entrever en una conversación con MásPúblico cierta tensión entre su partido y la organización de Equo.
La intención de Esquembre era acudir al Congreso y plantear sus divergencias para darles salida pero la situación ha explotado antes. Ayer Los Verdes de Villena lo hicieron público: el 3 de julio la asamblea decidió abandonar Equo. “Nuestra decisión no es por estrategias políticas sino por falta de confianza en la gestión que el proyecto Equo está llevando a cabo”. Añadían, en un comunicado, que “todos éramos conscientes que era infértil trabajar en el falso proyecto de Equo en la Comunidad Valenciana porque nunca se respetarían las reglas ni las normas y se estaba configurando un escenario político del cual no compartíamos en absoluto”.
Esta decisión culmina unos meses de tensión entre Iniciativa del Poble Valencià (IdPV), Els Verds Esquerra Ecologista del País Valencià (parte de la coalición Compromís), Equo y Los Verdes de Villena. A pesar de que aseguran que es un abandono “temporal”, desde Villena insisten que no entienden la “doble militancia” (haciendo referencia a Iniciativa del Poble Valencià) ni la “excesiva influencia” de IdPV y EVEE en los órganos de decisión de Equo.